Un juez militar pone en semilibertad a los tres jefes del 'caso Ucifa'
Un juez militar concedió entre julio y agosto pasados el tercer grado penitenciario a los tres máximos responsables del llamado caso Ucifa -pago con droga a confidentes-, apenas siete meses después de que el Supremo los condenara a ocho años. El coronel Francisco Quintero Sanjuán; el comandante José Ramón Pindado Martínez y el teniente Gonzalo Méndez Gutiérrez estaban en la prisión militar de Alcalá de Henares (Madrid).
El que fuera abogado del comandante Pindado durante todo el proceso, Manuel Cobo del Rosal, confirmó ayer que el tercer grado -por el que sólo tendrá que ir a dormir a la cárcel- fue concedido por un juez militar, después de que el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria de Alcalá y la Audiencia Nacional se declararan incompetentes para dictaminar. Los tres oficiales, adscritos en el momento de los hechos a la Unidad Central de Investigación Fiscal y Antidroga (Ucifa) del instituto armado, habían ingresado el 23 de enero en la prisión militar, por lo que apenas han pasado siete meses entre rejas. Fue el propio Pindado el que, a finales de julio pasado, comunicó telefónicamente a Cobo del Rosal que había salido en régimen de semilibertad. El letrado considera que la concesión del tercer grado es una medida "normal" y ajustada, ya que no es estrictamente necesario que los condenados cumplan la tercera parte de la pena. "Además, no existe riesgo de fuga en militares como Quintero, que lleva 25 años en el cuerpo, o Pindado, con casi 20", explicó Cobo del Rosal.
La decisión ha sorprendido y molestado a la Fiscalía Antidroga, que recurrirá en breve la medida basándose en un informe del director de la prisión militar, contrario a la excarcelación, según informó ayer Tele 5. Fuentes de la fiscalía mostraron su sorpresa por el hecho de que haya sido un juez militar el que concediera el tercer grado, ya que las decisiones sobre sentencias dictadas por un tribunal civil, y el Supremo lo es, competen igualmente a un juez civil. Cobo del Rosal, por su parte, también se mostró sorprendido por el recurso de la fiscalía.
Los tres oficiales han solicitado el indulto y tienen una página web para recabar apoyos a la medida de gracia. La Fiscalía Antidroga ya ha informado negativamente el indulto.
La Audiencia Nacional condenó en octubre de 1997 a un total de 88 años a 15 personas por el caso Ucifa. Entre ellos estaban Quintero -al que le cayó una pena de ocho años-, Pindado y Méndez -con nueve años cada uno, uno más por sendos delitos de falsedad-. La Audiencia llegó a dictaminar que, entre enero de 1988 y abril de 1991, la Ucifa se convirtió en una "organización de narcotraficantes".
El fallo aseguraba que la Ucifa no pretendía difundir drogas entre terceros sino, más bien, conseguir envíos de cocaína de Suramérica a España para aprehenderlos sin dificultad. Lo que se perseguía, según la sentencia, era obtener "ilusorios méritos". Además, se declaró probado que en las fechas en que ocurrieron los hechos varios miembros de la unidad detrajeron 17 kilos de cocaína y 2.100 gramos de heroína de las cantidades incautadas en varias redadas y que la con la droga se pagó a confidentes.
La Audiencia situó en "el escalón más alto" del sistema a Pindado, que había continuado la práctica iniciada por Quintero de premiar con estupefacientes a los colaboradores. La Sala Segunda del Supremo, en su sentencia 1329/1998, de 11 de enero de 1999, ratificó la de la Audiencia y condenó a los tres oficiales a ocho años de prisión, otros ocho de inhabilitación absoluta y a sendas multas de 100 millones, por un delito continuado contra la salud pública.
El Supremo, no obstante, anuló la condena de un año por falsedad para Méndez y Pindado al considerar que, de los hechos probados, se reflejaba que en el proceso estaban "todos los que están, pero no todos los que son", en referencia a "las presiones directas de algunos superiores para que se autoinculpara" el coronel Quintero.
