Las milicias integracionistas impiden la salida de Dili
Diversos grupos de las milicias proindonesias ocuparon ayer algunas zonas del aeropuerto internacional de Dili, el puerto y diversas áreas de la costa para impedir la salida de dirigentes pro y contra la independencia, según fuentes de los grupos paramilitares. Los grupos armados aseguran que quieren mantener en el país a todos los responsables políticos implicados en el proceso dirigido por las Naciones Unidas, aunque diversas fuentes consideran que la milicia Aitarak (Espina), que dirige Eurico Guterres, quiere evitar que algunos de sus correligionarios abandonen la capital, dejándole solo ante un estallido de la violencia. Y lo dejó bien claro en el aeropuerto de la capital rodeado de los suyos: "Impediremos que los líderes timorenses vuelvan a los hoteles de cinco estrellas a comer chuletas en Yakarta".A primeras horas de la mañana, un grupo de paramilitares controlaba la salida de algunas personas del aeropuerto internacional, ante la pasividad de las Fuerzas Armadas indonesias. Los milicianos pedían pasaportes y controlaban las identidades de algunas personas, sin que nadie hiciera nada por impedirlo. Una vez supervisados, pasaban los controles habituales del Ejército indonesio, que ha ocupado desde hace días el aeropuerto. Fuentes de la resistencia timorense informaron ayer de que algunos integrantes de las milicias controlan también la salida de los barcos del puerto de Dili.
Ante una previsible escalada de la violencia, muchos timorenses han abandonado sus hogares y se han refugiado en las montañas. Así está ocurriendo en Ermera, al sureste del país, y en Maliana, junto a la frontera con el área occidental de Timor. Otros intentan salir del país como pueden. Ayer mismo, un grupo de timorenses fue descubierto por las milicias cuando pretendían huir por la playa en una pequeña embarcación. Al ser detectados, salieron huyendo y abandonaron todos sus enseres. A primera hora de la mañana, en Maliana, una localidad próxima a Dili, dos estudiantes fueron heridos en un asalto, y tuvieron que ser trasladados a un hospital próximo, según indicó la entidad de derechos humanos Yayasan Hak, informa Efe.
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