La Junta confía en que la Cámara apruebe una decena de proyectos de ley, a pesar del debate preelectoral

VIENE DE PÁGINA 1 El Consejo de Gobierno también oyó ayer, según refirió el portavoz del Ejecutivo, Rafael Camacho, el informe político del presidente de la Junta, Manuel Chaves. "Ha pedido a los consejeros que sigan trabajando con la misma intensidad", aseguró Camacho, quien insistió en lo dicho por Chaves: "Ya se sabe que se va a culminar la legislatura, por lo que el horizonte se despeja". El portavoz confió en que el debate político ante la proximidad de la convocatoria de elecciones autonómicas "no contamine la aprobación, con el máximo consenso posible" de una decena de proyectos de ley que deben ser discutidos en la Cámara andaluza. El inicio de la "precampaña electoral" anunciado para la primera quincena de septiembre por el Partido Popular, fue tildado de "gratuito" por Camacho. "Quedan todavía muchos meses para celebrar las elecciones andaluzas", dijo el portavoz, quien recordó que los comicios, a los que Chaves aún no ha puesto fecha, serán, en todo caso, "en el 2000". "Tengo la esperanza de que esa apreciación errónea no dificulte los proyectos pendientes", indicó. Camacho destacó que el Ejecutivo andaluz y las socios de gobierno (el PSOE y el PA) sigue interesados en alcanzar "el consenso" con las formaciones políticas de la oposición para aprobar en la Cámara andaluza la ley de Turismo y, sobre todo, la ley de Cajas de Ahorros, que el portavoz catalogó de "norma de Estado". La elaboración del Presupuesto de la Comunidad del 2000 está siguiendo los pasos habituales, según Camacho, quien rechazó que el debate sobre la fecha electoral haya paralizado los trabajos de la Consejería de Economía, como mantiene el PP. El portavoz recordó que la Consejería no podrá ultimar sus cuentas hasta conocer el marco financiero del Estado y que, hasta entonces, el Consejo de Gobierno establecerá, en futuras reuniones, las prioridades políticas que deben reflejarse en el anteproyecto de ley de presupuestos. El portavoz del Ejecutivo andaluz también se mostró confiado en que las reuniones celebradas entre altos representantes de las administraciones central y autonómica se vuelvan a repetir este otoño. "Las últimas conversaciones discurrieron con normalidad y en un clima de diálogo cordial", aseguró Camacho, quien, de todos modos, dio por bloqueadas las relaciones en los asuntos de mayor relevancia económica: el reconocimiento del crecimiento de la población andaluza desde 1988 y la renegociación del sistema de financiación autonómica. Las próximas reuniones entre ambas administraciones girarán en torno a dos reivindicaciones del Gobierno andaluz que el Ejecutivo central ha anunciado que va a satisfacer: la transferencia de las políticas activas de empleo y de las cuencas hidrográficas intracomunitarias. "El anterior ministro de Trabajo [Javier Arenas] dijo que Andalucía tendría las políticas activas de empleo en enero de 1998", recordó Camacho.