La Iglesia pide que se vote sin miedo y en conciencia

La Iglesia hizo ayer un llamamiento al pueblo timorense, compuesto por más de un 90% de católicos, para que vote hoy "con conciencia cristiana y sin miedo" en el referéndum sobre el futuro de la ex colonia portuguesa con el fin de abrir el camino de "la reconciliación nacional". Los máximos representantes de la Iglesia católica, que siempre han defendido la voz del pueblo timorense para decidir sobre su autodeterminación, insistieron ayer en que la población vote "con valor y conscientemente" para resolver su futuro en esta oportunidad histórica.A pesar de la tensión de los últimos días y las amenazas latentes horas antes de la consulta, miles de timorenses acudieron ayer, tranquilos y en calma, a sus parroquias para escuchar los mensajes de sus dirigentes religiosos, que siempre han tratado de protegerlos frente a los abusos del poder indonesio.

El obispo de Dili, Carlos Ximenes Belo, pidió a sus fieles que "voten con conciencia cristiana y con valor". En su mensaje dominical leído ayer en todas las parroquias, el premio Nobel de la Paz en 1996 recomendó a los timorenses: "No tengan miedo, aunque sé que hay muchos que lo tienen", y les instó a que sean "responsables y conscientes, voten y regresen a sus casas para rezar, evitando siempre las provocaciones". El obispo, que se desplazó de madrugada a la localidad de Suai, en el sur de la frontera del territorio con la parte occidental de Timor, donde más de 1.000 personas permanecen refugiadas en la iglesia, afirmó: "Esta generación hará historia, y la gente de todo el mundo hablará de vosotros y de vuestros grandes corazones".

Mensaje del Vaticano

Desde Roma también recibieron aliento los timorenses. El Papa les solicitó a todos que contribuyan con su voto a "la reconciliación del país y solventen sus problemas" de forma pacífica. El mensaje de Juan Pablo II fue también leído en las misas dominicales en italiano, portugués y tetum, la lengua timorense.El secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, pidió ayer a las autoridades indonesias que respeten el resultado del referéndum y garanticen la seguridad de la población. Annan reclamó un esfuerzo para que los funcionarios de la ONU puedan trabajar "sin presiones ni amenazas" durante las próximas jornadas, que se prevén tensas y muy complicadas. En su mensaje, difundido por la representación de Naciones Unidas en Dili, Annan explica que esta consulta "es la única oportunidad de arreglar la situación pacíficamente en el largo conflicto de Timor Oriental".