Menos poder que la autonomía pero más que un municipio

El Estatuto de la ciudad autónoma de Ceuta, aprobado en 1996 tras una larga negociación entre el PP y PSOE, actualizó su régimen especial económico-fiscal de 1954 y añadió nuevas competencias, algunas propias de las comunidades autónomas, al hasta entonces sólo municipio ceutí. El GIL, formación liderada por el presidente del Atlético de Madrid y alcalde de Marbella, Jesús Gil, gobernará la ciudad autónoma a partir del sábado beneficiándose así de las competencias del régimen mixto, con poderes inferiores a los de una comunidad autónoma pero superiores a los de un municipio.Pese a no disponer de competencias en materia exterior, Ceuta cuenta con importantes poderes que van más allá de las que disponen los ayuntamientos. Los más importantes para los intereses particulares del grupo financiero que preside Jesús Gil son:

-Urbanismo. El GIL podrá recalificar suelo municipal en edificable al concederle el Estatuto a Ceuta esta competencia. Precisamente, uno de los principales problemas que tiene Ceuta es la escasez de suelo. Los expertos estiman que Jesús Gil -en pleitos con la Junta de Andalucía precisamente por cuestiones de recalificación de suelo en Marbella- dispondrá a partir de ahora de un importante instrumento para estimular sus intereses urbanísticos.

-Juego. El Estatuto de Ceuta concede al Gobierno de la ciudad autónoma la competencia para conceder licencias de juego. Con ello, Jesús Gil tiene garantizada, por vía legal, la apertura de nuevos casinos o la vía libre a los diferentes juegos de azar.

-Puerto. El Estatuto concede al alcalde presidente de Ceuta, Antonio Sampietro dentro de tres días, el poder de elección de la autoridad en un puerto franco como es el de esta ciudad autónoma, exento del control aduanero de la Unión Europea.

-Régimen económico-fiscal. El Estatuto, con su actualización, concede una bonificación del 50% sobre el impuesto de sociedades y sobre el IRPF. También dispone del privilegio de un IVA especial.

-Senado. Participación en el debate sobre el estado de las autonomías en la Cámara alta, en pie de igualdad, junto con Melilla, con las 17 comunidades autónomas de España.

Ceuta, no obstante, no alcanza el nivel de competencias de las comunidades autónomas. Por ejemplo, no dispone de poder sobre los grandes servicios, ni de mayor peso presupuestario, como es la educación y la sanidad. Pero las competencias de las que dispone rebasan con creces las poderes de los ayuntamientos, como Marbella y Estepona, donde el GIL había ejercido, hasta el momento, su poder en exclusiva.