El hijo del ex dictador dice que se estudia trasladarlo a España para evitar un juicio prolongado en Londres

El hijo del general Augusto Pinochet, Marco Antonio Pinochet, admitió ayer que se está estudiando la posibilidad de que su padre se entregue voluntariamente a la justicia española para evitar de esta manera un largo proceso judicial de extradición en Londres. El hijo de Pinochet hizo estas declaraciones en una entrevista concendida en exclusiva a la cadena de televisión CNN+."En este momento es una idea que se baraja, que se discute", afirmó el hijo del exdictador al ser preguntado sobre la posibilidad de un traslado de Pinochet a España para evitar un prolongado juicio de extradición ante los tribunales británicos. Marco Antonio Pinochet señaló que "no es algo concreto", pero "es una idea que se tiene y se está evaluando para tomar una decisión".

El hijo del senador vitalicio aseguró que "el punto más importante [para acortar su estancia en Gran Bretaña] es su salud, porque ha sufrido un deterioro en estos diez meses que, si bien no es visible, existe".

En este sentido, el hijo del ex dictador explicó que la capacidad de caminar de su padre ha disminuido notablemente. "Tiene mucha ansiedad para comer y todo eso va afectando su salud. Es indudable que esto hace pensar no sólo a él, sino al Gobierno y a la gente que de alguna manera está interviniendo en este problema, en tomar decisiones", precisó.

El entrevistado descartó de plano la posibilidad de que, a partir de la divulgación en la capital británica de informaciones de salud "bastante erráticos", se esté barajando por parte de los abogados defensores de su padre la estrategia de utilizar el deterioro de la salud del ex jefe del Ejército chileno para obtener su libertad.

"Es difícil manipular el estado de salud de un hombre que tiene 84 años, que tiene tantos problemas, en especial la diabetes, que es una enfermedad que cualquier médico puede corroborar que existe", afirmó. "No es que se esté manipulando su salud, sino que durante diez meses se van dando distintos escenarios. La gente normal no siempre está igual y más él con más de 80 años". "Una persona puede tener un cáncer terminal y no significa que se vaya a morir mañana", dijo, añadiendo que "sería absurdo manipular este tema porque existe un control y un chequeo periódico por parte de Scotland Yard".