Entidades contra la anorexia piden que se agilicen los ingresos judiciales
Dos expertos relativizan la influencia de la moda en estos trastornos
Las 30 asociaciones contra la anorexia y la bulimia que existen en España reclamaron ayer a los jueces que agilicen los trámites para el ingreso en hospitales de las personas que padecen trastornos alimentarios y se niegan a recibir tratamiento. Las asociaciones pidieron también la aprobación de un plan nacional de lucha contra estas enfermedades, que afectan a uno de cada 60 jóvenes.
Jaume Pagès, presidente de la Asociación contra la Anorexia y la Bulimia de Barcelona (ACAB), que organiza el II Congreso Estatal de Asociaciones contra la Anorexia y Bulimia inaugurado ayer en Barcelona, pidió "más sensibilidad" por parte de la justicia, aunque reconoció que se trata de un tema "delicado", ya que afecta directamente a la libertad de las personas. Pagès afirmó que el problema que se plantea ahora en los casos de ingreso judicial es que las personas con anorexia son enviadas a centros psiquiátricos, "donde su situación puede agravarse al encontrase con patologías mentales muy diferentes de la suya", o bien a un hospital público que carece de unidades específicas el tratamiento de la anorexia. Las asociaciones denunciaron la falta de medios sanitarios para atender estas patologías y reclamaron la creación de un plan nacional que permita dotar a la sanidad pública de las plazas hospitalarias necesarias. Sólo cuando la situación es crítica los pacientes (que en su gran mayoría son mujeres) pueden ser ingresados por urgencias. Pero si no es así, la espera para ingresar en un centro público se demora varios meses. En este momento son los centros privados los que absorben el mayor número de pacientes en tratamientos de día y consultas externas, pero carecen de las camas suficientes para ingresos.
Mortalidad del 6%
El congreso organizado por las asociaciones ha coincidido con el de la Asociación de Estudios y Trastornos de la Conducta Alimentaria, en el que se recordó que un tercio de los pacientes superan la enfermedad, otro tercio experimenta una mejoría sin llegar a curarse mientras que para el resto el mal se hace crónico. La mortalidad es del 6%. Según las asociaciones, los trastornos de la alimentación deben abordarse desde dos frentes: la prevención y el tratamiento. "La familia es un elemento fundamental en cualquier tratamiento", indicó ayer Vicente Turón, responsable de la unidad de Trastornos Alimentarios del hospital Príncipes de España de Bellvitge (Barcelona).
Para luchar contra los trastornos de la alimentación, que afectan al 1,5% de la población joven, Turón considera necesario potenciar la prevención primaria, destinada a evitar la aparición de nuevos casos. "Todos podemos ser agentes terapéuticos de prevención primaria", dijo. Tanto Turón como el presidente de la ACAB relativizaron el papel de la moda y de los medios de comunicación en la aparición de estos trastornos. "No hay que señalar culpables, todos hemos de asumir nuestras parte de responsabilidad", concluyó Pagès.
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