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Málaga acogerá una Bienal de Arte Andaluz organizada por su Asociación de Artistas Plásticos

La Asociaciónde Artistas Plásticos de Málaga (Aplama) culminó ayer su serie de acuerdos institucionales al recabar el apoyo de la Consejería de Cultura para su proyecto de organizar una Bienal de Arte en Málaga. Carmen Calvo prometió ayer 14 millones de pesetas, la asesoría del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo y la sede de Palacio Episcopal de Málaga para albergar una muestra que reunirá el próximo mes de febrero "todas las tendencias artísticas contemporáneas". El ámbito de la I Bienal será andaluz para acabar siendo nacional y, finalmente, internacional.

Tanto la consejera como el comisario de la Bienal de Arte Andaluz, Francisco González Romero, y el representante de Aplama, el escultor y sindicalista Francisco Jurado, señalaron que la voluntad de este encuentro será saber "qué ha sucedido después de Picasso en Andalucía". Teniendo a Picasso y a su futuro Museo en Málaga como continua referencia, unos y otros incidieron en que la aspiración del encuentro es la de acabar convirtiéndose poco a poco, en tres ediciones exactamente, en una Bienal Internacional. Aclaró luego Calvo que el espíritu de la primera edición, que recibirá de la Junta una subvención de 14 millones de pesetas, la asesoría del CAAC y la cesión del Palacio Episcopal, sería el de propiciar "un lugar de encuentro, debate y reflexión sobre el papel de la actividad artística en una sociedad cada vez más moderna". Así, además de la muestra resultante de la selección, que hará un jurado aún por determinar, de obras enviadas al comité organizador según las bases propuestas, se invitará a participara a los departamentos de arte, ciencias de la información e informática de las universidades andaluzas, y a los escritores, críticos de arte y periodistas a participar en este debate. El comisario de la Bienal, el profesor de Historia del Arte Francisco González Romero, dijo que el criterio de este encuentro era "descubrir qué se está haciendo ahora en Andalucía". Las bases de la convocatoria entregadas ayer a los medios de comunicación provocaron ciertas dudas sobre el espíritu de modernidad de la Bienal. Para participar en ella, además de ser andaluz o residente en Andalucía desde hace cinco años, hay que realizar pinturas, fotografías y esculturas de tamaños previamente determinados con sus marcos correspondientes. Ante la sorpresa de que quedasen excluidos géneros artísticos tan contemporáneos como la instalación, la acción o la performance, Francisco Jurado aclaró enseguida que la convocatoria estará "abierta a todas las tendencias" y que si "nos viene una instalación, naturalmente, no la vamos a rechazar". Jurado y González insistieron en que el sistema de selección de obras será "profundamente democrático" al hacerse mediante diapositivas. Por su parte Carmen Calvo dijo ayer que el Museo Picasso de Málaga cumplirá sus plazos de apertura previstos, aunque si no fuese así no pasaría nada, porque "no queremos hcer una chapuza". La consejera explicó entonces que desde que asumió el año 2000 como el de la apertura del Museo éste ha visto duplicado su espacio de 3.000 a 5.700 metros cuadrados y el número de obras cedidas -de 100 a 250 piezas- además de haberse descubierto importantes hallazgos arqueológicos en el subsuelo del Palacio de Buenavista, lo que debía llevar a todo el mundo a felicitarse con el aumento de calidad del futuro museo. "No nos estamos jugando seis meses más o menos, sino un museo que es cuestión de estado para el gobierno andaluz", añadió Carmen Calvo.

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