El sonido estival
Hechos como el acontecido el pasado año, cuando medio millón de personas se lanzó a la calle para celebrar la obtención del segundo puesto (no el primero) en la Liga de fútbol por parte del Athletic, demuestran que el vasco es un pueblo ávido de fiesta. Por eso no es de extrañar que, más allá del ansia de bronceado, sean muchos los ciudadanos que esperan la llegada del verano por tratarse de un periodo plagado de festivales musicales de toda índole. Un vistazo a la programación estival permite, por ejemplo, perderse en un bosque de vestidos autóctonos y sones tradicionales. Y es que no sólo de jazz se alimenta el verano. El festival de blues de Getxo y el Rockazoka bilbaíno no han sido sino los entremeses de un menú veraniego rico en folklore, masas corales, música de cámara, rock y pop. Especialmente numerosos son los festivales de folk: en julio se celebran los de Vitoria, Getxo (con representación de Asia, Europa, América y África) y Gernika (con agrupaciones de Georgia y Eslovenia); ya en septiembre hay un nuevo certamen folklórico en Getxo, centrado esta vez en la música, no en la danza. Instrumentos tradicionales Pero, entre todos ellos, destaca el organizado, entre el próximo miércoles y el día 31 de julio, por la agrupación Elai Alai en Portugalete. En él, con motivo de su vigesimoquinta edición, se darán cita danza, música, pasacalles de instrumentos tradicionales, conferencias y hasta un campeonato de ajedrez. También son frecuentes las muestras centradas en la música de cámara. Ahí están para acreditarlo la XIII Semana de la Música de Bakio (julio) y la Semana de Música Antigua de Vitoria (septiembre). San Sebastián celebra, entre el 4 de agosto y el 5 de septiembre, la sexagésima edición de su Quincena Musical. Supone la gran cita veraniega para los amantes de la música de cámara e incluso de la danza, ya que el día 21 acoge un espectáculo en el que intervienen 13 bailarines de compañías tan prestigiosas como el American Ballet Theatre, Ballet Nacional de Cuba y el Ballet Nacional de Marsella. Pero los más jóvenes seguramente estarán más expectantes ante la celebración de nuevas ediciones del Txapel Reggae (que en julio congrega en Armintza a 10.000 aficionados a la música reggae), del Bilbao Tropikal (que en julio inunda la capital vizcaína de ritmos calientes) y de festivales que combinan espectáculos de skateboard (patinaje) y música enérgica: es el caso de la IX Concentración Agroskate de Gernika (16 de agosto) y del Vans Warped Tour, festival itinerante de origen norteamericando que, un año más, pasará el 5 septiembre por Pamplona con grupos como Pietasters, Pennywise, Royal Crown Revue, Ice T. y Suicidal Tendences. Y aún hay más certámenes: el VIII Festival de Música de Pozalagua (Carranza) y el III Unanue Tar P.M. Musikaldia de Ondarroa, en julio; la Semana Internacional de Música de Bermeo, la IV Quincena de Pop Rock y Nuevas Músicas de Vitoria y el XXI Festival Internacional de Canción Marinera de Lekeitio, en agosto; la Semana Coral de Vitoria y el Festival de Habaneras y Canción Marinera de Getxo, en septiembre. Backstreet Boys Este verano también habrá artistas cuyas visitas congreguen a más público que muchos de los festivales reseñados. Sin ir más lejos, Mike Oldfield, que actúa el 1 de julio en San Sebastián; Backstreet Boys, que tocan en la misma ciudad el día 11; y Deep Purple, que tocan en Pamplona el 25 de julio. Otro gran polo de atracción musical son las fiestas de las capitales vascas, y especialmente la Aste Nagusia bilbaína, en cuyo marco se celebrarán el próximo mes de agosto alrededor de 60 actuaciones. Entre ellas, están confirmadas las de Sargento García, Reincidentes, Pablo Milanés, Hevia, Dorantes, Geoffrey Oryema (de Uganda), Ruper Ordorika, Luar Na Lubre, Kepa Junkera, La Chicana (conjunto argentino de tangos) y Twinkle Brothers, banda jamaicana de reggae. En el caso de Vitoria, resulta curioso que las polémicas txosnas hayan confeccionado una programación de conciertos tanto o más interesante que la del programa oficial de fiestas, gracias a la inclusión de grupos amigos del mestizaje como Amparanoia, Fermin Muguruza y Los Rabanes. De todos modos, no hace falta acudir a las capitales de provincia para disfrutar con una atractiva oferta musical. Otras localidades más modestas, como Santurtzi, confeccionan programas de fiestas en los cuales no faltan figuras nacionales de la canción.
