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¿California?

Miguel Ángel Villena

MIGUEL ÁNGEL VILLENA Un amigo está preparando un libro sobre la España del 2000 y tiene especial interés en dedicar un capítulo al País Valenciano que él considera de algún modo una suerte de California. No es la primera vez que se utiliza esta comparación. Ya en tiempos de la década socialista algunos dirigentes del PSOE aspiraban a dibujar un paraíso a base de palmeras, playas idílicas, parques temáticos y bloques de rascacielos. Todo ello, claro, bañado por el azul del Mediterráneo, amenizado por orquestas de ritmos exóticos y habitado por gentes indolentes recostadas sobre las dunas. Porque, tanto los antiguos gobernantes como los actuales han confundido sus deseos con la realidad y han pregonado y pregonan sin descanso las delicias de una economía equilibrada entre los servicios, la industria y una agricultura, donde abundan las naranjas y el vino como en las fincas, una vez más, californianas. Para redondear estos delirios de grandeza sólo faltaría quizá un toque de glamour de estrellas cinematográficas al estilo de Hollywood, ya que hasta los más optimistas reconocen que las casposas inauguraciones de la Mostra no pasan de ser un espectáculo provinciano, devaluado edición tras edición. Pero a mi amigo, un tipo culto y experimentado, le interesa sobre todo la otra cara de esta presunta California española. Quien haya visto la excelente película Los Ángeles confidential, habrá asistido a una trama de policías corruptos, empresarios sin escrúpulos, políticos ambiciosos y altos ejecutivos mezclados con negocios de prostitución en medio de un paisaje marcado por el poder, el dinero y el sexo a golpe de talonario. Así, muchos observadores neutrales de la sociedad valenciana se sorprenden de la proliferación de nuevos ricos por estas tierras. Los sociólogos cursis definen como clases emergentes a estos multimillonarios surgidos a partir de la expoliación de la costa o amparados en las recalificaciones urbanísticas. Pero, más allá de las definiciones, algunos protagonistas de la vida pública valenciana recuerdan a los personajes de Los Ángeles confidential.

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