Una construcción para cada producto y zona
En la tierras de olivar son más frecuente los molinos, sencillos aunque de gran envergadura. La tecnología empleada en los molinos configura una arquitectura sin parangón. La antiguas torres servían de contrapeso a las prensas aceiteras de viga, y torrecilla despuntan por centenares en los caseríos rurales. Viñedos y parrales determinan edificaciones que varían según las zonas y su dedicación vitivinícola, como la casa de viña en el Marco de Jerez, cuya distribución de habitaciones se hace alrededor de la explanada para el soleo de la uva, almijar ante el núcleo construido, un bloque rectangular abierto al exterior mediante el portal. Las casas de cierta amplitud pueden incluir las bodegas, con elaborados detalles estilísticos de raíz urbana lagares en Montilla-Moriles y áreas serranas, lagares y caserías de viña en Andalucía oriental, cortijos uveros en Almería. Variedad por áreas También hay variedad morfológica en áreas con personalidad propia. En el valle del Guadalquivir predominan las estructuras horizontales cerradas y organizadas en patios. Serranías y parajes orientales del sureste con solares de construcción nucleares, compactas, en bloques de cierta altura, similares a las que prevalecen en tierras manchegas y del levante mediterráneo. En la depresión bética, destacan las construcciones cerradas en torno a patios, de marcada horizontalidad y amplitud, a base de edificaciones longitudinales, con cubiertas de vertiente de teja. Los enclaves de la sierra, con unidades compactas y de mayor altura, se diferencian de los de las comarcas orientales, con conjuntos de núcleos modulares y abundantes piezas dispersas a su alrededor, a base de edificaciones cúbicas, de cubiertas planas con terrados y azoteas de leve inclinación con losas de pizarra o teja. "Este trabajo tiene una aplicación práctica: que las administraciones locales a las que les corresponde elaborar el planeamiento municipal y la ordenación del territorio tengan en cuenta la maravillas arquitectónicas y las cataloguen como tal", comenta la técnica de Arquitectura, Magdalena Torres. Cuando terminen el estudio, queda la provincia de Sevilla, donde tienen previsto montar una exposición de carácter itinerante y la publicación de volúmenes provinciales. "La gente se sorprende cuando se enteran de lo que tienen. A un matrimonio les dijimos que tenían un molino de gran valor patrimonial. Cuando volvimos meses más tarde, la mujer estaba enfadado con nosotros ya que su marido se había gastado los ahorros en la rehabilitación del edificio. Esto es lo más agradecido. Lo que demuestra que tu trabajo tiene sentido", sentencia Magdalena Torres.
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