Alberto Ruiz-Gallardón obtiene en la capital 65.000 votos más que Álvarez del Manzano

El reelegido presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha llevado su victoria electoral más allá del frente autonómico. Los resultados de los comicios muestran que el voto logrado por el PP en su lucha por los escaños de la Asamblea ha sido superior a los obtenidos por esta formación en las elecciones europeas y municipales. En este último ámbito destaca que Ruiz-Gallardón ha recibido en la capital 65.000 votos más que el segundo vencedor del 13-J, el alcalde, José María Álvarez del Manzano, al que supera por un porcentaje de casi cinco puntos (54,2%, frente al 49,45%).

Este juego de diferencias se repite a lo largo del mapa electoral, incluso en los municipios controlados por los socialistas, donde el fenómeno del voto cruzado (elección de candidatos socialistas para las municipales y de Ruiz-Gallardón para las autónomicas) ha brindado a la postre al presidente regional la mayoría absoluta. Un poder suficiente (1.296.456 votos, 55 escaños, el 50,8% del electorado) que le ha permitido aumentar su diferencia respecto a la oposición, pese a descender una décima en su porcentaje de voto. Así, la suma de fuerzas del PSOE e IU (43,98% del electorado) queda 6,86 puntos por debajo del resultado de Ruiz-Gallardón, cuando en 1995 esta diferencia se reducía a 5,24 puntos. La alianza de los partidos de izquierda, en cambio, sí que logra desbancar al PP si se toman como referente los resultados globales de las elecciones municipales. En éstas, el PP obtuvo en la región 1.147.242 votos (un 44,46% del electorado). PSOE e IU, en cambio, lograron juntos, 1.198.204 papeletas, el 46,41%. Esto implica que, a diferencia de los comicios de 1995, la izquierda se ha situado por delante de los populares en el terreno municipal.

La simetría se rompe cuando se analizan las elecciones europeas. Aquí, la cabeza de lista popular, Loyola de Palacio, logra el 49,2% de los votos (1.269.680 votos) frente al 44,69% de la oposición. Este éxito, sin embargo, no supera la marca alcanzada por el presidente regional.

Justo lo contrario ocurre en el PSOE, donde su candidata europea, Rosa Díez, quedó por delante de Almeida; y de Izquierda Unida, formación en la que el líder regional Ángel Pérez no logra igualar a Alonso Puerta.

Penetración electoral

Otro elemento de análisis procede de la penetración electoral de Alberto Ruiz-Gallardón en el denominado cinturón rojo, el área formada por las grandes ciudades del sur, habitual feudo del PSOE. En este terreno, excepto en Alcorcón y por la mínima, los socialistas han redoblado su poder. En algunos casos, como Fuenlabrada, incluso han alcanzado un apabullante 62% de los votos. Un porcentaje que ha erigido al alcalde José Quintana en el socialista más votado de la región. Pero incluso en este difícil espacio electoral, Ruiz-Gallardón ha logrado superar en 10 puntos (del 25% al 35%) a su candidato municipal y reducir correlativamente el número de votos autonómicos del partido del regidor socialista. Este fenómeno de voto cruzado se repite en Móstoles (195.000 habitantes), Leganés (173.000) y Getafe (143.000). En todas estas localidades, los apoyos obtenidos por Ruiz-Gallardón superan de tres a siete puntos los conseguidos por los candidatos municipales y reducen la distancia con su rival socialista. Prueba de la singularidad de este efecto radica en que carece de equivalente en la oposición. Ni Cristina Almeida ni Ángel Pérez logran superar en las citadas localidades a sus cabezas de lista municipal. En el caso de Pérez, además, la diferencia alcanza los dos puntos (60.000 votos).

Este fenómeno alcanza un efecto multiplicador cuando se trata de los municipios del norte, sobre todo, los más ricos, como Majadahonda y Pozuelo. En el primero, el candidato local alcanzó la mayoría con el 48% de los votos. Un porcentaje que aumentó hasta el 62,2% a la hora de votar a Ruiz-Gallardón. Y en Pozuelo de Alarcón, el 48,6% del PP municipal se transformó en un 63,9% en los comiciós autonómicos.

El Ayuntamiento de Madrid es otro de los campos en que el voto cruzado favorece a Ruiz-Gallardón frente a los representantes de su propio partido. En la capital, la cuenta de resultados del presidente regional suma 798.662 votos, 65.770 más que el alcalde, quien también queda por detrás de Loyola de Palacio (44.021 votos de diferencia).

Los concejales del PP achacan esta distancia al desgaste: Juan Antonio Gómez-Angulo, número tres de la lista municipal y, probablamente, primer teniente de alcalde, lo explica: "El alcalde lleva ocho años gobernando una administración que se caracteriza, sobre todo, porque está muy cerca del ciudadano. Esto acarrea un desgaste importante". "A pesar de esto, no creo yo que las cifras sean muy significativas", añadió, informa AntonioJiménez Barca.

Mercedes de la Merced, número dos de la lista, también recurrió a la misma idea: "En las pasadas elecciones municipales pasó lo mismo: cuando Álvarez del Manzano llevaba sólo cuatro años gobernando aumentó su representación, tal y como le ha pasado ahora a Ruiz-Gallardón. Es un reflejo típico y no alarmante". Sigfrido Herráez, concejal de Vivienda, tuvo otra respuesta además del cansancio del electorado: "Hay que tener en cuenta que cada vez se vota más por afinidades personales y no por partidos. Y no tenemos que olvidar que Ruiz-Gallardón ha llevado el metro a varios distritos".

La desventaja del alcalde frente a su compañero de filas regional no se reproduce en el caso del PSOE-Progresistas ni de IU. Entre los socialistas, Almeida se queda a 30.000 votos de Fernando Morán, y en Izquierda Unida, Pérez apenas supera los 100.000 votos frente a los 127.285 de Sabanés.