El Museo de Bellas Artes rememora la etapa de Gentileschi como pintor cortesano en Londres
Será una exposición de pequeñas dimensiones, pero de una calidad extraordinaria. Alrededor de la obra de su colección Lot y sus hijas, el Museo de Bellas Artes de Bilbao, en colaboración con la National Gallery, de Londres, y el Museo del Prado, presentará a partir de mañana Orazio Gentileschi en la corte de Carlos I, una decena de obras de la etapa final de la vida del pintor italiano en Inglaterra. Además de su interés artístico, la organización de la muestra, que fue exhibida anteriormente en Londres, aporta una notable relevancia internacional al Museo de Bellas Artes.
El cuadro Lot y sus hijas, de Gentileschi (Pisa, 1563-Londres, 1639), fue adquirido por el museo bilbaíno en 1924. Es una pintura al óleo, de gran formato (2,26 por 2,82 metros), pintada en 1628, que refleja el pasaje biblíco de la huida de Lot con su familia para salvarse de la destrucción de la ciudad de Sodoma. A su lado, se mostrarán una colección de una decena de pinturas del gran pintor caravaggista Gentileschi, realizadas en la plenitud de su trayectoria artística: los años en los que permaneció en la corte de Londres, al servicio del rey Carlos I de Inglaterra. Gentileschi vivió en Londres la etapa final de su vida. Se instaló en la capital inglesa en 1626 y allí permaneció hasta su fallecimiento, trece años más tarde. Tras una formación incial en el manierismo, Gentileschi evolucionó posteriormente, bajo la directa influencia del tenebrismo de Caravaggio, hasta alcanzar un estilo propio en los trabajos realizados en la corte londinense. Lot y sus hijas fue encargada en ese período y formó parte de la colección real desde 1628. Entre las obras reunidas en la exposición destacan las dos versiones de Moisés salvado de las aguas, una de ellas propiedad del Museo del Prado y otra procedente de una colección privada. Ésta será la primera vez en la que ambas obras, una pintada para Carlos I de Inglaterra y la otra para Felipe IV de España, podrán verse juntas desde que fueron pintadas hace más de 300 años. Descanso en la huida a Egipto, David y Goliat, y José y la mujer de Putifar, otros temas biblicos pintados por Gentileschi en Inglaterra, estarán también colgados en la exposición. La selección de pinturas presentada en el Museo de Bellas Artes se completa con otra versión de Lot y sus hijas, de la colección Thyssen-Bornemisza, y un San Francisco sostenido por un ángel, que, aunque no fueron pintadas para la corte inglesa, han sido incluidas en la exposición para ofrecer una la visión más amplia de la trayectoria del autor. El comisario de la exposición, Gabriele Maria Finaldi es el punto de conexión entre las instituciones que ha colaborado en la organización. Finaldi, conservador de pintura italiana y española en la National Gallery, forma parte de la comisión artística del Museo de Bellas Artes de Bilbao, un organismo asesor de la dirección del centro, que también cuenta con la colaboración, entre otros, del director del Museo del Prado, Fernando Checa, el escultor Eduardo Chillida y el profesor y crítico de arte Francisco Calvo Serraller. La muestra fue presentada en la National Gallery, pinacoteca que no posee ni una sola obra de Gentileschi, el pasado mes de marzo. En los dos meses y medio en los que la selección de pinturas de Gentileschi se mantuvo abierta al público, fue visitada por 85.000 personas. La exposición permanecerá en Bilbao hasta el 5 de septiembre. El Museo del Prado de Madrid presentará un versión reducida de la colección presentada en Londres y Bilbao a partir del 20 de septiembre. Orazio Gentileschi en la corte de Carlos I es la primera exposición que se dedica al artista italiano y supone un anticipio de la muestra que presentará en el año 2004 el Museo Metropolitano de Nueva York, con obras de Gentileschi y de su hija Artemisia.
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