Lizarra tendrá que esperar

Hace cuatro años HB sumó en Hernani 3.670 votos, el 37,90% de las papeletas escrutadas. Con siete ediles en un arco de 17 asientos, la coalición abertzale fue relegada a la oposición por segunda vez consecutiva. La unión de EA (cuatro ediles), PSE (tres) y PNV (uno) proporcionó la alcaldía a José Antonio Rekondo, quien fue reelegido como regidor en un pleno tomado por los violentos y plagado de incidentes. En Hernani se da por seguro que una alianza de los partidos de Lizarra tras el 13-J es inviable, vista la distancia y la antipatía que existe entre HB y el alcalde Rekondo. En este municipio se erigió un Monumento a la Integración, lugar que aprovecharon los candidatos de la lista de EA-PNV para sacarse la foto electoral. Pero la integración todavía no es posible mientras no cicatricen completamente las heridas que se han abierto en el pueblo. Todo apunta a la repetición del actual pacto tripartito, que tampoco tiene garantizada la mayoría absoluta. IU y PP cuentan con un respaldo electoral muy minoritario, aunque pueden inclinar la balanza si, como se presume, las fuerzas quedan equilibradas tras el 13-J. La concejal de IU Ángela Velasco ya ha apoyado en varias ocasiones propuestas de HB durante este curso.