Un fiscal en riesgo

. "Ya sabemos que el fiscal de Medio Ambiente es un ave en situación de riesgo. Hay quien se empeña en hacerle esperar. Pero es su derecho. Somos respetuosos. Pero, a pesar de que es un ave en situación de riesgo, es un ave que está sobrevolando Madrid y detectando puntos de riesgo. Y actúa. Y vamos a seguir actuando". Con tan ecológica metáfora aludió ayer el jefe de la fiscalía madrileña al conflicto desatado entre el Gobierno regional, del PP, y el fiscal especializado en Medio Ambiente, Emilio Valerio, tras denunciar éste una licencia dada por la Consejería de Medio Ambiente. "Hay una tibieza en todas las administraciones. Todas. Los grandes contaminadores son los ayuntamientos, porque no tienen dinero o no se lo gastan. Rara vez nos encontramos con iniciativas tendentes a depurar las aguas fecales antes de verterlas en los ríos. No digo nada del escaso control que se está produciendo en el área de contaminación atmosférica por las autorizaciones a empresas altamente contaminantes". El responsable de la fiscalía madrileña atribuyó parte de esta feria de desmanes ecológicos al "fárrago de legislación" existente en esta materia. "Hay que ser un verdadero experto para caminar por esas procelosas aguas. Ya saben lo que significa:si la ley no es clara, la puerta está abierta. Es un marasmo legislativo. Yo pediría que se aclare la ley, pero sobre todo que las autoridades no miren para otro lado".