Alumnos de Bellas Artes de Sevilla diseñan carteles contra el consumo abusivo de alcohol La Consejería de Asuntos Sociales utilizará los trabajos premiados para sus campañas

Los carteles con los que la Consejería de Asuntos Sociales ilustrará sus campañas en contra del consumo abusivo de alcohol los han diseñado los alumnos de la Facultad de Bellas Artes. Estudian Diseño Gráfico y Grabado. Uno de sus profesores es el que les ha embarcado en esta aventura. No es la primera vez que el diseñador Enrique Acosta les propone trabajar para las administraciones: "Es una forma de estimular a los alumnos a que trabajen sobre temas actuales y sociales, como se hace en cualquier empresa. Y además, de esta forma, se van dando a conocer para cuando acaben la carrera", explica el profesor. El Comisionado para la Droga, dependiente de Asuntos Sociales, ha editado en forma de postal los 20 trabajos que los alumnos han presentado a este concurso, pero sólo tres carteles han conseguido premio. La ganadora ha sido una chica de Andújar (Jaén), Laura Gómez. Su cartel representa de forma esquemática los efectos de un consumo de alcohol sin medida: con el alcohol flotas mientras te hundes, reza el mensaje. Y a tráves de colores chillones y trazos, el dibujo muestra una figura humana mitad flotante, mitad hundida. "Un domingo por la noche, harta ya, me puse a llorar y apagué el ordenador porque no me salía nada. Cogí papel y lápiz y me salió un boceto. Volví a encender el ordenador y desarollé la idea". Gómez dice que le ha venido muy bien las conferencias que han recibido en clase de publicistas, para hacerse una idea de por dónde va el mercado y lo que quieren los clientes. Y también una charla de alcohólicos anónimos que se acercaron al aula para contarles su experiencia. "Mi hermana, que es más joven, hace botellones, y de lo que piensa también he sacado alguna idea", cuenta Gómez. Otros dos alumnos, María Antonia Ramírez y Carlos Hernández Jaramillo también consiguieron premio, el segundo y el tercero respectivamente. Ramírez dice que la idea de su cartel, unas botellas atravesadas por una gráfica hospitalaria que indica la muerte cerebral cuando el nivel de ingestión de alcohol es alto, muestra lo peligroso de darle a la botella de forma incontrolada, pero se admiten otros límites más moderados. "No se trata de prohibir, sino de indicar que pasarse bebiendo es fatal". Esta idea se ha valorado a la hora de seleccionar a los ganadores, según dijo el profesor Acosta. No es cuestión de prohibir, ni de dramatizar, sino de inculcar un uso responsable". Carlos Hernández Jaramillo propone en su cartel mil y una formas de pasar el tiempo alejado del alcohol, de lo más nocivo de las noches de movida. Estas alternativas en forma de símbolos, se enfrentan a una cara de Drag Queen. "Esta es una carrera [Diseño Gráfico] que se aplica a la calle. Los trabajos no sirven para ser expuestos en un museo porque son producto de consumo inmediato. El diseño caduca". Por ese motivo está encantado con la idea de que su cartel pueda utilizarse en la campaña institucional de la Consejería. Así lo afirmó el titular de Asuntos Sociales, que una vez que hubo entregado los premios, se levantó de la mesa y se hizo a un lado para que un grupo de teatro de la Universidad, Teatro Líquido, ofreciera una performance. El espectáculo cumplió su misión, porque resultó angustioso y ellos querían demostrar el lastre agobiante que supone la dependencia del alcohol. Los chicos se ahogaron en alcohol, que era agua, entre gritos y espasmos. La música la puso un violonchelo y la mano temblorosa sobre una flauta de la ganadora, Laura Gómez.