Criminales
El artículo de Manuel Vicent publicado en EL PAÍS sobre pacifistas y belicistas en la no guerra de Yugoslavia merecería ser declarado texto escolar, octavilla obligatoria y editorial consensuado. Los belicistas que cada día se solazan con los bombardeos inteligentes desde sus living rooms o desde sus retretes están recibiendo tacones postizos atlánticos, les regalan la condición de hacedores globales sin ensuciarse las manos de sangre, sólo la lengua. Bien declarado criminal de guerra Milosevic, al que se le han probado 300 asesinatos de albanokosovares, quedamos a la espera de que declaren criminales de guerra a todos los que han contribuido a la matanza de unos 1.000 serbios de Serbia, serbios o albaneses de Kosovo, matanza perpetrada desde el cínico cálculo de que aumentar el desastre de Kosovo sería el paso previo para solucionarlo.Cuando veo al portavoz de la OTAN, Mr. O"Shea, convirtiéndose en estrella mediática que supone que pueda interesarnos que es lector de Balzac, pienso en lo peligroso que es cualquier ser humano que hace y hará carrera por el procedimiento de ayudar a redactar las necrológicas de la historia. Como peligroso es vuestro Solana, esa nueva matriz de español universal, necesitado de demostrar que un socialista ex pacifista puede estar, como el que más, a la altura de las exigencias éticas de la historia, como un paso más en su carrera hacia la condición de jefe de seguridad del Imperio en su virreinato europeo. E igual triste papel están haciendo esos profetas de la euroizquierda que nada más acceder al poder la han convertido en una calcomanía de cualquier posible euroderecha, demostrando una vez más su condición de realquilados en el caserón del orden mundial, uno grande y libre. Hay que confiar en una financiación pública de la causa que lleve al Tribunal de La Haya a todos los criminales de guerras declaradas o no. Absolutamente a todos.
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