Menem insiste en la dolarización de la economía argentina
"Quiero irme del Gobierno con la economía dolarizada", confesó el presidente argentino, Carlos Menem, ante algunos de sus más estrechos colaboradores como Jorge Rodríguez, jefe del gabinete, Alberto Kohan, ministro secretario general del Gobierno, y Carlos Corach, ministro del Interior. La frase trascendió ayer a través de un diario bonaerense y es fiel reflejo del clima de intranquilidad que se vive en los círculos económicos de Argentina.Desde que el financiero George Soros declarara la semana pasada que el peso está sobrevalorado no pasa un día sin que economistas, políticos, financieros y periodistas canten las excelencias de la ley de convertibilidad entre el peso y el dólar, y dibujen un cuadro catastrófico ante cualquier intento de modificar la actual situación.
Tanta unanimidad en defensa de la paridad monetaria ha empezado a tener un matiz en la medida que aumentan las voces que proponen dar un paso más y dolarizar plenamente la economía argentina. El presidente del Banco Central, Pedro Pou, se ha erigido en uno de los principales defensores de la dolarización y ya ha convencido a un sector del Gobierno, especialmente el más cercano al presidente.
La propuesta es la adopción de la moneda estadounidense por decreto de necesidad y urgencia, con el objetivo de permitir a particulares, empresas y al Estado cobrar y endeudarse en dólares, en lugar de cobrar en pesos y endeudarse en dólares como ocurre actualmente. De este modo, estima Pou, se eliminaría el riesgo cambiario y bajarían los tipos de interés.
La idea no ha sido bien recibida por el ministro de Economía, Roque Fernández, que se resiste a aceptar una dolarización por decreto. Fuentes de este ministerio indicaron que la adopción de la moneda estadounidense convertiría la economía argentina en más vulnerable y dependiente del ingreso de capitales del exterior. El economista José Luis Machinea, de la alianza opositora, consideran que las declaraciones de los miembros del Gobierno ponen en riesgo la estabilidad del peso en vez de reforzarla.
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