Marqués asignará emisoras de radio antes de dejar el Gobierno asturiano

Las nueve licencias de radio en frecuencia modulada pendientes de conceder en Asturias serán adjudicadas por el actual Gobierno regional después de que se hayan celebrado las elecciones autonómicas del 13 de junio y antes de la investidura del nuevo Ejecutivo, según anunció el presidente del Principado, Sergio Marqués. Todos los grupos de la oposición han reaccionado con enorme malestar a ese anuncio, máxime cuando el nuevo Gobierno, salido de las urnas, estará formado dentro de un mes.

Esas licencias de radio fueron objeto el pasado mes de abril de una intensa polémica a raíz de que Sergio Marqués hiciera público en el Parlamento asturiano un documento manuscrito anónimo con el que, según su versión, fue objeto de presiones por parte del Gobierno central para que de forma dirigida y unilateral concediera las nuevas frecuencias de FM en Asturias a las cadenas radiofónicas Cope, Radio Voz y Radio España.Tanto el PSOE como el PP, IU y Partíu Asturianista (PAS), todos ellos con representación parlamentaria, sostienen que la decisión debe ser adoptada por el Ejecutivo que salga elegido el mes próximo y no por un Gobierno saliente, que se encuentra en el periodo final de su mandato, sin respaldo parlamentario -sólo cuenta con el apoyo de seis de los 45 diputados de la Cámara- y en situación de prórroga presupuestaria.

El candidato socialista a la presidencia del Principado, Vicente Álvarez Areces, ha advertido de que una concesión en tales circunstancias podría ser susceptible de impugnación por parte del próximo Ejecutivo asturiano. Marqués ironizó que, en su condición de abogado, le gustaría conocer la argumentación jurídica en la que el PSOE fundamentaría su eventual recurso ante los tribunales contra la resolución de un concurso público por un Gobierno legalmente constituido por el mero hecho de que la adjudicación se haya producido en periodo de elecciones. Sergio Marqués aseveró que el concurso de las licencias de radio será resuelto con "estrictos criterios técnicos" y "en las condiciones en las que fue convocado el concurso", y sin amiguismos.

Durante el debate parlamentario de la moción de censura que contra Sergio Marqués defendió el PP ante la Cámara asturiana el pasado 10 de abril, y que fue derrotada, el presidente asturiano desveló que había recibido presiones desde el Gobierno central para que favoreciese a las cadenas radiofónicas Cope, Radio Voz y Radio España en el reparto de las nuevas licencias de frecuencia modulada, cuya concesión son potestad de la comunidad autónoma. La negativa a acatar estas y otras orientaciones similares fueron, según su versión, los motivos fundamentales del conflicto que lo enfrentó al vicepresidente primero del Gobierno, su antiguo amigo Francisco Álvarez Cascos. Marqués exhibió un documento que, según su testimonio, le fue "entregado en mano en un despacho del palacio de La Moncloa" por el entonces secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Rodríguez, en presencia de Álvarez Cascos. Según las instrucciones, cinco de las nueve emisoras debían ser concedidas a la cadena Cope y tres a Radio Voz.