Solchaga y García Añoveros creen que el IRPF precisará reformas

Los dos ex ministros de Hacienda, Carlos Solchaga y Jaime García Añoveros, coincidieron ayer en señalar que el "impuesto sobre la renta, que ha entrado en vigor este año, necesitará nuevos cambios". Solchaga argumentó que esta reforma fiscal "no se adapta a la situación europea", en especial, respecto del tratamiento de las rentas del capital y de las plusvalías.García Añoveros, por su parte, apuntó hacia el problema de la progresividad que, aseguró, no se puede conseguir plenamente en un marco de libertad de movimientos de capital. Recordó que el tipo fijo único para todas las rentas está excluido por la Constitución española, pero afirmó que "las nuevas situaciones generan derecho nuevo".

García Añoveros y Carlos Solchaga participaron ayer junto al secretario de Estado de Hacienda, Juan Costa, en la presentación de un libro sobre El impuesto sobre la renta de las personas físicas. Ley 1998 y su reglamento, del que son autores Luis María Cazorla y José Luis Peña. Costa recordó que los objetivos de esta reforma fiscal son la simplificación, reforzar la progresividad y reducir la carga fiscal.

Por otra parte, el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), José María Cuevas, asegura que el Gobierno debe seguir aplicando el máximo rigor en la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado para el año próximo, así como una rebaja de la presión fiscal, tanto directa como indirecta, a las empresas.

Cuevas, en un artículo conmemorativo del 20º aniversario de la patronal del metal (Confemetal), señala que será preciso luchar para que no se reduzcan los incentivos de la actividad empresarial en distintos campos y se consiga la supresión de tributos como el impuesto de actividades económicas (IAE).

A juicio de Cuevas, además, es necesario abrir un debate sobre la adecuada financiación de la Seguridad Social y de las políticas de bienestar social con el fin de que las cuotas de las empresas puedan rebajarse y situarse a la altura de las de sus competidores en otras áreas.