Alicante revisa el plan del "barrio" para evitar que se abran más locales
El último pleno ordinario del Ayuntamiento de Alicante en este mandato aprobará a final de este mes la revisión del plan especial del casco antiguo, una iniciativa que, sobre el papel, regulará la conservación activa de los edificios de valor histórico-artístico desocupados o infrautilizados. El plan propone medidas para mejorar la calidad ambiental, los niveles de accesibilidad y la regulación de los usos, y plantea la declaración del popular barrio alicantino como "zona acústicamente saturada", lo que acarreará la suspensión de licencias para nuevos locales de ocio, la única actividad económica de la zona. La meta última del plan es integrar el casco antiguo en el desarrollo de la ciudad. La primera y principal medida consiste en fomentar su capacidad potencial como barrio residencial. Para ello se considera prioritaria la odenación de dos áreas emplazadas en puntos estratégicos cuya traza urbana ha desaparecido: la charnela Virgen del Socorro-Villavieja, hasta la plaza del Puente (la Medina), y el área del Portón, conectada a la avenida de Alfonso el Sabio. El plan contempla, asimismo, el cambio de imagen la de avenida de Juan Bautista Lafora. Para revitalizar la vida del barrio antiguo se potenciará el uso residencial, y se incentivará la implantación de pequeños talleres artesanales y comerciales, así como la actividad turístico-cultural. El documento establece también normas más restrictivas para las actividades recreativas de pubs, disco-bar, cafés-cantante, salas de fiesta y discotecas. El número de estas actividades quedará limitado por la anchura de la calle y por la distancia entre locales.
