El preso que se fugó del hospital se entrega a la Guardia Civil

Trece horas fugitivo. Ángel G., de 22 años, preso de la cárcel de Soto del Real que escapó el pasado jueves al mediodía de la custodia de la Guardia Civil durante una revisión médica en el hospital Gregorio Marañón, se entregó a la una y media de la madrugada del viernes. El recluso consiguió fugarse a la carrera mientras le cambiaban las esposas. Salió a la calle, cogió un taxi, se tiñó el pelo y luego acudió a ver a su mujer y a su hija. Sus familiares le convencieron para que se entregará a cambio de que le garantizarán su traslado a otra cárcel.El recluso huyó por temor a que los presos de Soto atentasen contra su vida ya que confesó a los funcionarios que había comprado droga en la propia prisión, según comentó a Telemadrid.