Un juez investigará las fichas de la policía de Arganda sobre la vida sexual de sospechosos

Las fichas ilegales de la Policía Local de Arganda que registran las tendencias sexuales, enfermedades infecciosas, indumentaria, acentos e incluso ademanes de los sospechosos serán destruidas, y los responsables de la iniciativa, investigados judicialmente. Así lo anunció ayer el concejal de Seguridad y diputado regional, Benjamín Martín, del PP, quien adelantó que el Ayuntamiento abrirá un expediente interno para depurar responsabilidades. Esta respuesta fue insuficiente para la oposición y los colectivos de homosexuales, que, unidos ante el escándalo, pidieron al unísono que tanto el concejal como su alcalde, Ginés López, dimitan por su responsabilidad en el escándalo.

Nadie defendió ayer la aberración cometida en Arganda. Pero todos buscaron culpable. El concejal de Seguridad y diputado regional, Benjamín Martín, el primero. Para él, la culpa corresponde a sus subordinados. "Yo no tengo nada que ver ni firmé ninguna orden", se apresuró a decir, al tiempo que insistía en que la policía le había informado de que ninguna ficha (elaboradas en los ordenadores municipales) había llegado a cumplimentarse. "Y aunque se hubiesen rellenado, yo no tendría conocimiento de lo ocurrido, porque habrían estado protegidas por ley y yo no hubiese tenido acceso a ellas. Pero, vamos a llevar el caso ante el juzgado y el fiscal jefe, y nosotros mismos iniciaremos una investigación interna", dijo Martín.El origen de las fichas se remonta al pasado 3 de mayo, cuando, por indicación del director de Seguridad de Arganda, Jesús García (el cargo de confianza del concejal en la Policía Local), los agentes recibieron la orden de rellenar unas nuevas hojas de filiación para detenidos y ciudadanos identificados en la vía pública (por ejemplo, en un control de rutina). Estas hojas incluían un epígrafe de "datos antropomórficos" de los sospechosos, con apartados como enfermedades (sida, hepatitis, parásitos...), raza (gitano, árabe, africano...), indumentaria (harapiento, descuidado...), ademanes (amanerado, brusco...) y "otros aspectos" (homosexual, transexual, prostituta...).

El candidato a la alcaldía de Arganda por el PSOE-NI, Pedro Díez, se mostró "indignado" y exigió la asunción de responsabilidades políticas por parte del concejal de Seguridad y del alcalde. "No es sólo un problema técnico de protección de datos, es un escándalo político. Ambos tienen que poner su cargo a disposición del PP. Y que sea ese partido que se dice tan centrista el que decida qué hace con ellos. No olvidemos que Martín no sólo repite como candidato municipal, sino que también va en la lista autonómica del PP. Veremos qué decide Ruiz-Gallardón. Que demuestre su talante", retó Díez. La concejal socialista de Arganda Elvira Ortega también recalcó la condición de candidato del edil de Seguridad: "No puede presentarse a las elecciones alguien que utiliza así a la policía".

Trillado así el frente de la dimisión, la candidata del PSOE-NI a la presidencia regional, Cristina Almeida, aprovechó para presentar una pregunta al ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, en la que le solicitaba su opinión sobre el caso y le exigía la adopción de medidas para evitar su repetición.

Actitudes fascistas

El coordinador regional de IU, Ángel Pérez, cargó primero contra Martín. Tras exigir su dimisión por alentar actitudes "represoras y claramente fascistas" se centró en su condición de diputado y elevó el tiro hasta Ruiz-Gallardón: "Este atropello a la libertad de los ciudadanos demuestra que el afán centrista del PP es sólo maquillaje".Más parca en sus declaraciones, la Fundación Triángulo, que defiende los derechos de homosexuales y lesbianas, anunció que denunciará el caso ante la Delegación el Gobierno y la Agencia de Protección de Datos para determinar si esta "ilegalidad" se ha extendido a otros pueblos. Por su parte, UGT consideró el "aberrante fenómeno" como un hecho circunscrito a Arganda.