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Interior encarga a la policía la protección de la nueva cárcel de Palma de Mallorca

El Ministerio del Interior ha ordenado que sea el Cuerpo Nacional de Policía (CNP) el que se encargue de la seguridad de la nueva cárcel de Palma de Mallorca, cuya inauguración está prevista para junio. Desde hace diez años la vigilancia exterior de las prisiones es competencia de la Guardia Civil, excepto en las de El Puerto de Santa María (Cádiz) y Melilla, donde la prestan unidades especiales del CNP.Cien de los 800 agentes de policía que integran la plantilla de Palma de Mallorca serán destinados a la seguridad del nuevo centro penitenciario, según informó ayer la Unión Federal de Policía (UFP). Este sindicato se opone a este plan argumentando "la escasez" de plantilla existente en la isla. Recuerda que Mallorca recibe en verano a millones de turistas y que en julio se celebrarán las competiciones deportivas de la Universiada-99.

Las unidades de intervención policial (antidisturbios) deben hacer frente a varios eventos importantes -entre ellos la Operación Verano, la Operación Paso del Estrecho, el Xacobeo, los Campeonatos Mundiales de Atletismo de Sevilla y la Universiada- que harán prácticamente imposible que miembros de estas unidades sean utilizados para reforzar la protección de la nueva cárcel de Palma de Mallorca.

Tras la unificación de la Policía Nacional y el Cuerpo Superior de Policía, en 1986, cuyo resultado fue el Cuerpo Nacional de Policía, la vigilancia de la práctica totalidad de las prisiones quedó encomendada a la Guardia Civil. En la actualidad, el CNP sólo se ocupa, mediante dotaciones especiales, de la protección exterior de los penales de El Puerto de Santa María y Melilla.

La Unión Federal de Policía se queja de que "la Guardia Civil, que cuenta con similar número de efectivos y cuya carga de trabajo es infinitamente menor, se evada de realizar servicios de protección y seguridad en la nueva prisión de Palma de Mallorca".

Este sindicato, próximo a la UGT, ha anunciado que pondrá en marcha una campaña de prensa para alertar a los europeos de la "inseguridad ciudadana que habrán de afrontar si deciden pasar sus vacaciones en Mallorca".

Un dirigente sindical incluso sugiere que la delegada del Gobierno en Mallorca, Catalina Cirer, ha cedido a "presiones fácticas" para que la policía se encargue de la prisión en vez de la Guardia Civil.

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