El Museo del Agua de Callosa cierra a los 13 días de su inauguración

Ni una quincena duró abierto. El Museo del Agua de Callosa d"En Sarrià, inaugurado el pasado 1 de abril a bombo y platillo como una oferta más dentro de la visita a las fuentes del río Algar, cerró a los 13 días de abrir sus puertas al público por falta de personal. Pasadas las vacaciones de Semana Santa, durante las cuales lo visitaron más de un millar de personas, la persona contratada para atender al público finalizó su contrato eventual, y ahora es necesario convocar un concurso para cubrir esta plaza.

Todo apunta a la falta de previsión de la Concejalía de Personal de Callosa como la principal causante de que este museo, una muestra didáctica de los usos e historia del agua en la comarca de La Marina Baixa en la que se han invertido 100 millones, se haya cerrado al poco de ser inaugurado. Del 1 al 13 de abril pudo ser visto por los visitantes de El Algar, como una oferta más incluida en el precio de la entrada al paraje natural. Ahora sólo se abre para visitas concertadas con colegios e institutos, y esos días el personal dependiente de la Concejalía de Cultura se ocupa de explicar a los escolares los diferentes tramos de la exposición. La edil de Cultura, María del Carmen Espasa, del PP, aseguró que el museo volverá a abrirse coincidiendo con el inicio de la temporada alta estival, a finales de junio, cuando las fuentes del Algar registran su máxima tasa de visitantes. Espasa señaló que en breve se aprobará el presupuesto del museo, tras haber sido sometido a exposición pública, en el cual se incluye una partida destinada a la plaza de encargado de la sala. Hasta junio, sin embargo, no será posible visitar las instalaciones. El Museo del Agua, ubicado en la Casa del Partidor (ocupada por los operarios y el ingeniero de la antigua central eléctrica callosina), ofrece un recorrido por los usos patrimoniales, históricos, autóctonos e industriales de este elemento. Su inauguración fue la meta de un largo camino iniciado en 1995, cuando el último Consell socialista aprobó el proyecto, que tuvo que ser paralizado cuando todo el presupuesto se empleó en restaurar la Casa del Partidor y la Casa de Máquinas, y el Ayuntamiento tuvo que buscar nuevas subvenciones para dotar al museo de contenido. Este nuevo contratiempo supone otro receso para el despegue definitivo de las instalaciones. Equipos informáticos dotados de pantalla táctil, que a su vez acciona un láser que proyecta sobre una maqueta los hitos hidrológicos, y reproducciones a escala de ingenios del pasado para conducir y utilizar el agua, conforman los ejes del museo, basado en yacimientos arqueológicos reales de la Comunidad Valenciana.