Pilatos por Doñana
Es la tercera vez que escribo sobre el desastre de Aznalcóllar, y aún no sé si será la última. Quiero que entienda que muchas veces la literatura acompañada de algo de imaginación es de los pocos recursos que nos quedan a algunos adictos a una cierta dosis de utópico escepticismo. De los tonos que he gastado en mis anteriores manifestaciones, denuncia, lamentación, cinismo, impotencia... hoy me toca echar mano de la euforia y felicitar a todos los que han participado en esta gran obra de teatro. Yo también me voy a unir al esperpento. Allá voy: ¡Gracias a todos los participantes en la fiesta por su responsabilidad y su veracidad al hablarnos de lo que ha pasado! Los ciudadanos estamos tranquilos y convencidos de que aquello fue un leve accidente de alguien que pasaba por allí. ¡Gracias por haber hecho coincidir este pequeño desliz y su aniversario con la Feria de Sevilla (también podía haber sido con un buen partido de fútbol o una actuación de Curro Romero). El ciudadano de por aquí ya sabemos que reacciona y se moviliza ante cosas importantes. ¡Gracias por querer recompensarnos con un futuro corredor verde! Ya nos huele a vergel, a niños corriendo por hermosas y frondosas orillas, a peces bailando a ritmo de vals... Yo personalmente asistiré y aplaudiré desde la tribuna cuando a Mr. Boliden le den la gran insignia al supergenerador de empleo y bienestar, cuando la ministra, cual nueva Heidi, plante el primer pino del "corre hedor", y cuando el coro de consejeros correspondiente entone el "Sevilla tiene un color especial...". Luego buscaré a Pilatos y le felicitaré por haberse lavado las manos con tanto arte en el albero de la Feria y en los lodos putrefactos de Aznalcóllar. La fiesta entonces seguirá... hasta la próxima.- Santiago Delgado Llopart. Sevilla.
Bachillerato de arte
Tengo un sobrino que desde muy pequeño manifestó grandes dotes para el dibujo y la pintura. Este año termina sus estudios de Educación Secundaria y tiene gran ilusión de cursar el bachillerato artístico para, posteriormente, ingresar en la Facultad de Bellas Artes. Pero para su sorpresa y la de toda la familia nos encontramos con que este bachillerato sólo se imparte en dos centros de toda Sevilla y en ninguno de los dos le garantizan el que su inscripción sea aceptada, ya que tienen una demanda tres veces superior al número de plazas disponibles. Comentando el tema con nuestros amigos nos enteramos de que el pasado año la hija de unos primos y el nieto de unos vecinos no pudieron matricularse en este bachillerato por falta de plazas y han tenido que hacerlo en otro por el que no tienen ninguna ilusión ni les servirá en sus futuros estudios superiores. Hemos ido a la Delegación de Educación y allí nos dicen que lo matriculemos en el Bachillerato de Sociales donde podrá elegir una optativa llamada dibujo artístico con la cual recibirá preparación suficiente para los estudios universitarios de Bellas Artes; sin embargo, sabemos por algunos profesores de esta facultad que esto es insuficiente y no estará bien preparado. ¿Qué es lo que pasa con este bachillerato? ¿Por qué, si al parecer hay suficiente demanda, no existe en todos los institutos? Yo creía que este problema de no poder cursar los estudios deseados se planteaba al llegar a la Universidad y no en el bachillerato, por lo menos no lo era antes, por lo que habrá que preguntarse si esto es lo que ofrece a nuestros jóvenes la tan cacareada LOGSE. Está muy bien que la educación sea obligatoria hasta los 16 años, pero también hay que cuidar las enseñanzas del bachillerato para los alumnos que quieran seguir estudiando.- Carmen Gómez Sánchez. Sevilla.
La otra Feria
Hace más de una semana que finalizó la Feria de Abril, fiesta sin par a la que el Ayuntamiento dedica toda la atención que se merece, pues es la cara de Sevilla ante los miles de forasteros que nos visitan. Pero hay otra cara de nuestra maravillosa Feria que padecemos principalmente los vecinos inmediatos: desde la limpieza, mejor dicho, la falta de limpieza especial que requiere la cantidad de desechos de toda índole que se producen como consecuencia del público que accede a la misma. Lo que queremos denunciar ahora es mucho más grave: el Conservatorio de Música de Triana está situado en la avenida de Blas Infante, 14, enfrente de uno de los principales aparcamientos de la Feria y separado del inicio de la S-30 por una calle que conduce al cuartel de la policía, a nuestro centro y muere en el IES Los Viveros. Allí se ha permitido la acampada de los vendedores ambulantes durante toda la Feria, los cuales, saltando una pequeña verja de acceso al Conservatorio, han convertido nuestro patio exterior en una auténtica letrina, con inmundicias, excrementos, pañales sucios y otros "detalles" que impiden abrir las ventanas de las aulas a causa del insoportable hedor. Y sin pensar en el riesgo de infecciones a que puede dar lugar en un centro público de enseñanza. Creemos que el Ayuntamiento debe plantearse el problema de estos ambulantes y proporcionarles aparcamiento adecuado e incluso servicios higiénicos. Los dos años precedentes se controlaron las acampadas y no hubo ningún problema.- Visitación Magarzo Gutiérrez, directora del Conservatorio de Música Triana. Sevilla.
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