Intercambio baldío
Los inversores españoles continúan expresando sus dudas sobre la bonanza de la situación económica a través de un constante exceso de papel en el mercado. La mayoría tiene muy claro que hay que acentuar las precauciones, al menos hasta conocer el próximo IPC, pero la liquidez del mercado, muy alta en esta última sesión, indica que también son numerosos los que toman posiciones aprovechando el descenso de los precios.El mercado continuo negoció ayer 1.062,31 millones de euros, 176.754 millones de pesetas, que no sirvieron para mantener los índices. La Bolsa de Madrid perdió el 0,68%, 6,09 puntos, y su índice general vuelve a alejarse del límite superior de la banda de fluctuación en la que se viene moviendo desde hace casi cuatro meses y que oscila entre los 850 y los 900 puntos.
La llegada del Dow Jones a los 11.000 puntos en la tarde anterior no ha servido de aliciente para el mercado español. Incluso daba la sensación en esta jornada de que los logros ajenos no hacen más que desesperar a los inversores.
El Ibex 35 se quedó ayer a sólo 19 puntos del nivel del 10.000, lo que hizo a los habituales del parqué madrileño recordar que este indicador superó los 10.000 puntos mucho antes que Nueva York y que ahora les separan 1.000 puntos, un 10%.
La Bolsa de Nueva York dedicó esta última sesión a las retiradas de beneficios, un movimiento que empieza a ser habitual tras la conquista de cada nuevo nivel psicológico. El Dow Jones terminó con una pérdida de 128,50 puntos, el 1,17%, y quedó en 10.886,10 puntos. Los datos de la economía de Estados Unidos muestran un crecimiento firme y una confianza creciente, algo que no se produce en Europa.
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