"Musho" Athletic

"Dani, Dani ¿te acuerdas cuando le ganamos al Valencia por cuatro? Fue en Gandía, en el 84. Yo estaba allí". Así, a voz en grito y abriendose paso entre la afición asaltó un hincha a uno de los jugadores del Athletic de Bilbao que, durante años, formó parte de la selección nacional. El hombre se acercó al ex futbolista con expresión de júbilo en la cara y en las manos un pañuelo rojiblanco y un bolígrafo para que el jugador estampara su firma. Dani no recordaba el momento histórico que recordaba el forofo, pero agradeció el gesto con abrazo y rúbrica. La del sábado fue noche de júbilo en Sabiote (Jaén). En torno a 600 personas -con pins, escudos, corbatas rojiblancas y otros complementos que no dejaban lugar a dudas sobre sus preferencias deportivas-, representantes de 170 peñas del Athletic, se dieron cita en la cena de clausura del XXVII Congreso de Peñas del Atlethic de Bilbao, un evento que anualmente congrega, en diferentes puntos de España a una afición que se distingue por su devoción, "porque es incondicional, porque siente los colores del Atlethic como el hincha vasco", subrayó Dani. Esta es la segunda vez que organiza una peña jiennense. El primer congreso, hace 27 años, tuvo lugar en Bailén. ¿Por qué Sabiote? "Porque somos de una manera tan abierta, en Andalucía y en Sabiote, que cuando pedimos organizarlo no nos lo podían negar", aclara Juan Blanco, fundador de la peña local y relaciones públicas del congreso. Por ese argumento y porque, de los poco más de 4.000 habitantes del pueblo 190 militan en las filas de la peña atlética, una cifra que en esta población no han podido igualar nunca los aficionados culés, ni madridistas. En los últimos tres días, los congresistas se han paseado por la provincia, han conocido el parque natural de Cazorla, Segura y las Villas, han participado de actividades culturales y hasta de una misa rociera en su honor. Entre paseo y copa de recepción, se han dedicado a hablar de lo suyo: el Athletic, visto por aficionados de comunidades autónomas tan distantes en lo físico como próximas lo deportivo. Entre los 600 asistentes había hombres, mujeres y niños de Castilla-La Mancha, Valencia, Galicia, La Rioja y, por supuesto, del País Vasco. Además de hacer turismo de interior han decidido dos cosas. Una de ellas ha sido elegir a Ismael Urzaiz como jugador más regular, a pesar de la directa competencia con Etxebarría, al que también le ha reconocido su "buen momento" profesional. La otra ha sido citarse, dentro de un año, en Barcelona y en el 2001 en Tomelloso (Ciudad Real). La noche del sábado sirvió para un último encuentro de convivencia, pero esta vez con un invitado de lujo, el presidente del club, José María Arrate. Tampoco él se libró del fervor rojiblanco sabioteño. "Arrate, hombre, ven acá a hacerte una foto con nosotros", le gritaban desde cualquier rincón. Después de posar con varios grupos, de repartir la firma por bufandas, banderines, boinas o pañuelos, el presidente bilbaíno señaló que "si pudiera, a esta gente le daba la luna, es lo mínimo". Para Arrate, la afición atlética resulta especial por su fidelidad al club. "Eso es lo que hace que llevemos tanto tiempo en primera línea". Incluso aunque estuvieran de segundones, porque para los atléticos su club es todo un emblema, pase lo que pase. Alonso Almagro, el presidente de la peña de Sabiote asegura que desde que tiene uso de razón, su equipo no le ha dado "ni un disgusto". "Nosotros con el equipo siempre estamos contentos, vaya mejor o peor", sentenció. Aunque le asalta la nostalgia y con ella los nombres que, en su juventud, le hicieron redoblar su compromiso atlético, "aquel equipo que fue el rey de España", con jugadores como Zarra o Gainza, míticos a su vez de la selección nacional. Y es que, tal como corearon los aficionados en el pabellón deportivo donde se celebro la cena, el Athletic es "musho Athletic".