Redondo dice que PNV y EH no harán público el pacto hasta después del 13-J
El secretario general de los socialistas vascos, Nicolás Redondo, aventuró ayer que el PNV no hará público el pacto de legislatura con EH hasta después de las elecciones porque tiene que poner la "cara amable" para no perder votos. El líder del PSE-EE aseguró, pese a todo, que ambas formaciones tienen un pacto preelectoral para apoyarse "allá donde puedan tener mayoría los nacionalistas". Redondo reiteró que su partido "no está dispuesto a pagar un precio por la paz" y que no piensan callarse en este asunto.
Redondo abordó ayer en su discurso durante la presentación de las candidaturas socialistas en la capital vizcaína la tregua de ETA, la persistencia de la violencia callejera y las diversas políticas de pacificación en Euskadi. El líder de los socialistas vascos acusó al PNV de no haber tenido "coraje para parar, con todos los medios que tenía", una violencia callejera que ha afectado desde la tregua de ETA a los partidos no nacionalistas. Redondo volvió a pedir a los nacionalistas moderados, que han visto en los últimos meses como el PNV "ha dejado de hablar del Estatuto y se dedica a hablar de la gran Euskal Herria", que mediten su voto y "apoyen nuestras candidaturas". El secretario general del PSE-EE denunció la avalancha de la "comunión sabiniana nacionalista" desplegada contra socialistas y populares desde la firma del Acuerdo de Estella y la declaración de tregua de la organización terrorista, el pasado mes de septiembre. Redondo aseguró que la actividad política de los firmantes del Pacto de Lizarra -manifestaciones, huelgas y reuniones de electos municipales en Pamplona- sólo ha conseguido "alejar más a Navarra de Euskadi" y que el presidente del Gobierno, José María Aznar, no flexibilice su política penitenciaria. El candidato socialista a la Diputación de Álava, Fernando Buesa, denunció la "comedia" preelectoral sobre los pactos en Álava. El dirigente socialista alavés se preguntó por qué ahora "nos quieren a los socialistas" y se contestó diciendo que "los socialistas somos imprescindibles" para integrar Euskadi. Buesa reafirmó la apuesta de su partido por un proyecto político basado en el autononismo constitucional y dijo que para hacer una política social no valen ni el proyecto "excluyente" de Lizarra, ni el "proyecto mercantilista" popular.
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