UGT acusa al Gobierno de querer acabar con los astilleros del Sur

La situación que atraviesan los astilleros de Andalucía (Cádiz, Puerto Real y Sevilla), sin cartera de pedidos a corto plazo, no es gratuita, según el sindicato UGT, cuyo secretario provincial en Cádiz, Carlos Dorante, acusó ayer al Ministerio de Industria y al presidente de Astilleros, Marcelino Alonso, de haber iniciado "una política de acoso y derribo contra los astilleros del Sur" en beneficio de los del Norte. Dorante recordó que Alonso ha anunciado esta semana que, de conseguir el contrato de construcción de tres o cuatro buques gaseros para Repsol, éstos se construirían en la factoría vasca de Sestao. El sindicato cree que el futuro de la construcción naval pública "es tremendamente negro" y sostiene que, una vez que las gradas se queden vacías, "comenzarán los despidos, en vez de lograrse pedidos", dijo Dorante. El dirigente sindical recordó la importancia estratégica de la industria naval, que durante 1998 ejecutó pagos por valor de 80.000 millones de pesetas en la Bahía de Cádiz. "Todo eso está en peligro", dijo Dorante, que avisó: "Si hace falta, si no hay una respuesta satisfactoria y rápida, recuperaremos la calle para recuperar a los astilleros". El presidente del PP de Cádiz, Antonio Sanz, negó que el Gobierno central pretenda el cierre de los astilleros andaluces.