Presionar a la Administración

El protocolo firmado ayer por los empresarios franceses y españoles en Nimes será entregado a los representantes políticos de los dos países en un intento de "presionar" para acelerar las obras necesarias. Las del proyecto del trasvase del Ródano son importantes, pero no lo son menos, según se vio en la reunión celebrada ayer, las del AVE. El tren de alta velocidad fue definido por los asistentes al encuentro como un proyecto "estratégico" tanto para el transporte de pasajeros como para el de mercancías. Las intervenciones francesas y españolas insistieron en el papel central de las comunicaciones para el comercio. Un empresario español recordó que para Cataluña la alta velocidad es también el ancho europeo que conectará el puerto de Barcelona con la red ferroviaria de Europa, en la confianza de que habrá una extensión hacia el puerto de Tarragona. Un representante francés, tras reiterar que la conexión entre España y Francia debe ser una realidad en el 2004, matizó que comercialmente y visto desde el norte, detrás de Barcelona están Tarragona, Valls y Valencia. Si se apura, Zaragoza. "Más allá y hasta Madrid no hay nada", afirmó en una alusión a que el trazado ferroviario tiene que satisfacer las necesidades de los viajeros y las de quienes envían mercancías de un mercado a otro. Antoni Negre explicó que Albert Vilalta, responsable de que las obras se lleven a cabo, fue quien hizo el trazado entre Barcelona y Francia por encargo de la Generalitat y añadió que estaba seguro de que no actuaría ahora en contra de su propio proyecto.