El zoco de la inspiración

Existen muchas formas de financiar un viaje de estudios. Desde la tradicional fiesta discotequera hasta la más vanguardista de atiborrarse de bebidas refrescantes carbonatadas para coleccionar sus etiquetas. Aunque para eso, como dice el propio anuncio, hay que estar un poco "loco". Pero cuando el viaje lo emprenden alumnos de una escuela de Arte, la inspiración y la imaginación deben prevalecer. Máxime si el destino es Nueva York. Un grupo de 25 estudiantes del último curso de las distintas especialidades de la Escuela de Artes Plásticas y Oficios Aplicados de Granada decidió, hace unos meses, organizar un pequeño mercado de objetos artísticos y de artesanía para pagarse parte de su viaje de estudios. En los pasillos del centro permanece abierta hasta esta tarde esta improvisada galería, en la que pueden verse -y sobre todo comprarse- obras de los propios alumnos y otras cedidas por profesores y artistas de prestigio. Hasta ahora, la idea -inédita en este centro- ha resultado rentable. "Aunque no es para tirar cohetes, hemos vendido más de lo que pensábamos. Lo suficiente para pagarnos el 25% del viaje", explica la organizadora Alicia Puertas, de 5º curso de Alfarería. En el mercado se muestran objetos procedentes de todos los talleres de la Escuela de Artes y Oficios, correspondientes a las 18 especialidades que se imparten en ella. Por precios módicos, que oscilan entre las 300 y las 3.000 pesetas, todavía se pueden conseguir grabados de gran fuerza expresiva, útiles figuras de cerámica, marionetas, forjas metálicas, tejidos, fotografías y cuadros pintados con diversas técnicas. Los bolsillos más holgados podrán incluso adquirir obras aportadas, de forma gratuita, por artistas cotizados. Ese es el caso del pintor jiennense Julio Juste, que regaló a los estudiantes una serigrafía y dos profesores de la Escuela, Gabriel Ramos y José Francisco González, también contribuyeron con varios trabajos a sufragar los gastos del viaje. Un óleo de la almeriense Pepita Rubio, aún colgado en los pasillos en espera de dueño, es la obra más cara: 75.000 pesetas. Los estudiantes parten mañana mismo hacia Nueva York. La elección de la ciudad norteamericana no admite dudas para ellos: "Es la capital mundial del arte contemporáneo y queda demasiado lejos para poder volver algún día", arguyen. El viaje -como todos los de estudios- tendrá un marcado contenido cultural. Durante diez días visitarán diversas galerías y salas de arte de la ciudad de los rascacielos y, sobre todo, sus principales museos: Arte Moderno (MOMA), Guggenheim y Metropolitan. Los artículos que mayor demanda han tenido en el improvisado mercado han sido las piezas de cerámica y los grabados. Sin embargo, los estudiantes no consiguieron vender ni una sola de las caricaturas de políticos realizadas a plumilla. "Son del alcalde de Granada, Gabriel Díaz Berbel, Manuel Chaves, José María Aznar y Bill Clinton", enumera Alicia Puertas, de Escultura. "Pero, a pesar de que son bastante irónicas y cuestan sólo 800 pesetas", continúa Puertas, " nadie se decide a llevárselas". Quizá, consideran los alumnos, porque la gente prefiera no ver a los políticos ni en pintura.