Nuevo cementerio

Una vez consolidada la cubierta del aparcamiento, la Concejalía de Obras y la de Chamberí, a cuyo frente está el señor García-Alarilla, cuyos días en el Ayuntamiento están contados, han comenzado la ejecución de las obras en superficie de la plaza y están levantando tumbas, nichos, trincheras, haciendo de la plaza un cementerio.Como el Ayuntamiento se empeñó en trasplantar los árboles que circundaban la plaza y que estaban en buen estado, para hacer la reforma con comodidad y sin obstáculos, se ve en la necesidad ahora de levantar los alcorques o jardineras para los arbolitos que los sustituyan, y ya lleva construidas siete trincheras de más de 20 metros de longitud y nueve filas de nichos cada fila. Resultado: una plaza que podía ser abierta, libre, sin grandes obstáculos, aparece como una construcción para muertos y con unos paramentos muy útiles e ideales para los grafiteros.

Si a ello añadimos que los materiales que van a utilizar son pobres y baratos y que siguen empeñados en mantener una zona para los perros, convirtiendo la plaza en una perrera municipal permanente al aire libre, pronto contaremos con otra plaza (la plaza Mayor de Chamberí) vulgar, pueblerina, ruidosa, contaminada, insalubre, peligrosa para la salud y la integridad física de las personas y, en definitiva, indigna de Madrid, a pesar de ser una joya de espacio urbano madrileño. Esperamos que los niños/as y, por qué no, también los mayores den vida a lo que se construye sin imaginación y sin vida.- y seis firmas más.