Arenas sostiene que "las aspiraciones" del PP en Asturias "están intactas" pese a su crisis

El secretario general del PP, Javier Arenas, anunció ayer, en la proclamación de los candidatos asturianos en Gijón, que la dirección nacional del partido se volcará en las elecciones del Principado para tratar de repetir como primera fuerza política pese a la crisis interna del último año. Arenas eludió pronunciarse sobre la base de esas previsiones electorales, pero sostuvo que "las aspiraciones" del PP en la comunidad "están intactas". También rechazó las interpretaciones malévolas sobre la ausencia en el acto de ayer de su predecesor en el cargo, Francisco Álvarez Cascos.

La dirección nacional del PP se volcará de forma preferente durante los dos próximos meses en las elecciones municipales del País Vasco y en las autonómicas y las locales de Asturias. Los dos territorios son "prioritarios" para el partido, que concentrará en ambos la mayor presencia de sus dirigentes hasta el 13 de junio, según anunció ayer, en Gijón, el secretario general.Javier Arenas, que viajó a Asturias para respaldar a su candidato a la presidencia del Principado, Ovidio Sánchez, y a los cabezas de lista a los distintos municipios, aseguró que, pese a la crisis abierta en el PP regional en el curso del último año, el partido "mantiene intactas sus aspiraciones para repetir como primera fuerza política" en la comunidad.

A esta convención de candidatos populares no asistió el vicepresidente primero del Gobierno, Francisco Álvarez Cascos. Sí lo hicieron los presidentes del partido en el País Vasco, Carlos Iturgaiz; Castilla y León, Juan José Lucas; Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, y la Comunidad Valenciana, Eduardo Zaplana.

Arenas desautorizó cualquier posible interpretación malévola al viaje que ayer realizó Cascos a la otra punta de España, a Sanlúcar de Barrameda (Cádiz): "Especular con su ausencia no tiene sentido porque él, personalmente, conmigo y con la dirección del PP de Asturias, hemos preparado este acto".

Para despejar cualquier resquicio de duda, Arenas afirmó ante los militantes congregados que su "concepto del partido" y su análisis de la crisis del PP asturiano "son los mismos" que los de Cascos. Y apostilló que "Asturias es una prioridad para José María Aznar".

El PP, que hace cuatro años logró por vez primera el Gobierno de Asturias, una comunidad tradicionalmente de izquierdas, no lo da por perdido pese al grave enfrentamiento interno del último año que desembocó en la escisión de los partidarios de Sergio Marqués, el presidente autonómico que se enfrentó públicamente a Cascos.

Según Arenas, los "estudios" que ha hecho el PP sobre sus posibilidades en Asturias "aún no son definitivos", pero le permiten asegurar que las "aspiraciones para revalidar su condición de primera fuerza están intactas".

Desde mediados de diciembre, Asturias ha recibido 19 visitas de ministros, a razón de una por semana. Ayer lo hizo por vez primera el nuevo secretario general, Arenas.

Ante una numerosa concentración de militantes populares, en el pabellón de Asturias del recinto ferial de Gijón, Arenas comprometió todo su apoyo: "En Asturias aspiramos a la victoria y tenemos avales para alcanzarla".

El nacimiento de la Unión Renovadora Asturiana (Uras), el partido promovido por los seguidores de Marqués, no parece inquietar a Arenas: "El electorado del PP se va a mantener muy fiel al compromiso que tuvo con nosotros en 1995 porque hemos cumplido".

Marqués no fue citado ni una sola vez en el acto preelectoral de ayer, pero fue una referencia constante y reiterada de todos los oradores. Arenas afirmó, en alusión implícita a la Uras, que "algunos pueden ofrecer una aventura personal, pero el PP tiene un programa".

La crisis del PP asturiano obedeció, según su secretario general, a un problema político de dos concepciones distintas: la de quienes "defienden un proyecto de partido" y la de quienes quisieron anteponer "sus afanes personales".

La exaltación de la "lealtad" al programa y al partido y la "disciplina" como premisas básicas de la acción política fueron una referencia común en los discursos de los cuatro líderes regionales que viajaron a Asturias para respaldar a Ovidio Sánchez.

Marqués se había referido a ellos la víspera como "eficaces extranjeros que vienen a apuntalar un tambaleante PP en Asturias para levantar la moral del partido". Sánchez le replicó ayer que "en Asturias jamás nadie ha sido extranjero".

Por otra parte, Arenas aconsejó al PSOE que se dote de un candidato a la presidencia del Gobierno "más solvente" y acusó a José Borrell de "falta de seriedad, responsabilidad y prudencia" por intentar "politizar la Agencia Tributaria", no mantener en el juzgado sus imputaciones contra Josep Piqué y expresar su apoyo a la creación "de un nuevo foro" en el País Vasco que supondría "sepultar la mesa de Ajuria Enea".