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Garzón anula el auto que permitió los registros a HB en San Sebastián

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha declarado "nulo y sin efecto" el auto emitido el 15 de marzo por la titular del juzgado central de instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, María Teresa Palacios, que posibilitó el registro de la sede de HB de la calle Urbieta de San Sebastián y la incautación de abundante documentación y material informático. El portavoz de la coalición, Arnaldo Otegi, califica la decisión de "limpieza de cara del Estado".

El titular del juzgado número 5 de la Audiencia Nacional ha estimado el recurso interpuesto por el abogado Íñigo Iruin y ha ordenado la devolución de todo el material sacado de la sede de HB y que permanece precintado en el cuartel de la Guardia Civil de Intxaurrondo. Garzón estima que el auto de Palacios forma parte de un "razonamiento estereotipado por cuanto no hay hechos a los que aplicarlos, ni delito al que referirlos, ni indicios racionales a los que acudir". En el auto se señala que la juez Palacios omitió en su autorización el relato de los hechos que la motivaban, ya que sólo mencionó la petición de la Guardia Civil, y no precisó qué materiales podrían intervenirse.Además de haber confundido al solicitante del registro -el jefe del Servicio Central de Policía Judicial, indicó la juez, en vez del teniente de Información de la 513 comandancia de la Guardia Civil-, Palacios no especificó, según Garzón, "la relación causa-efecto" entre su petición y las bases de la misma, referidas a declaraciones del presunto colaborador de ETA Mikel Egibar, detenido el 10 de marzo, en las que éste habría indicado que un ordenador de esa sede "posee una base en la que recogen los datos y los informes obtenidos de la actividad en el extranjero para realizar el control sobre los miembros de la izquierda abertzale". Dice que Palacios omitió el delito perseguido o los indicios que justificasen "la violación de un derecho fundamental", como es la inviolabilidad de una sede política con la que Egibar no tenía relación, ya que trabajó en otra sede de HB.

Por otra parte, Pepe Rei, exjefe del equipo de investigación del clausurado periódico Egin, salió ayer de la prisión de Alcalá-Meco tras pagar los 15 millones de pesetas de fianza que le impuso Garzón, al que Rei calificó ayer de "esbirro de Interior".

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