Dos empresas que 'casan' bien en España
Renault ha recuperado en este último año el primer puesto en las ventas de automóviles en España, uno de los dos países europeos con presencia industrial de Nissan.No es de extrañar, por tanto, que apenas conocida la firma del acuerdo ya se hayan levantado las primeras voces, de optimismo en algún caso, como el del consejero de Industria de la Generalitat de Cataluña, Antoni Subirá, y de preocupación en otros, como corresponde a los sindicatos.
Para Subirá, la planta de Nissan en la Zona Franca de Barcelona saldrá beneficiada con este acuerdo, ya que se trata de la "única factoría europea de la firma japonesa especializada en vehículos todoterreno, segmento que no tiene cubierto Renault."
Ésta es, sin duda, la complementariedad más importante de ambas firmas en España, pero no la única, aunque también han comenzado a desarrollarse inversiones que seguramente serán revisadas tras la nueva situación creada con la firma del acuerdo.
La más destacada es la realizada por Nissan para la producción de turismos, concretamente del modelo Tino, al que se han destinado 40.000 millones de pesetas, 30.000 en la Zona Franca de Barcelona y 10.000 en la planta de Cuatro Vientos en Madrid, donde se fabrican los motores diésel.
Competencia
El Tino es un modelo que entra en clara competencia con el Megane Scenic, una de las joyas actuales de Renault, cuya presencia en España supone más del 20% de la facturación total del grupo gracias a la producción de las cuatro plantas instaladas. Dos de vehículos en Valladolid y Palencia, una de motores en Valladolid y otra de cajas de cambio en Sevilla.La filial española de la empresa francesa es la más importante del grupo y alcanzó unos beneficios en 1998 superiores a los 10.000 millones de pesetas.
Por su parte, Nissan produce también algunos modelos en exclusiva para el mercado europeo en sus fábricas de Barcelona, Madrid, Navarra y Ávila, aunque sus resultados no han sido nada boyantes hasta el ejercicio de 1997, cuando obtuvieron unos beneficios de más de 1.200 millones de pesetas, que han sido superados en 1998, según su director general, Rafael Boronat, gracias a una producción de 82.000 unidades.
