División de opiniones ante el plante

Boicoteo de botas colgadas o exhibición futbolística en los estadios de las Ligas europeas. Los jugadores yugoslavos no son unánimes a la hora de decidir qué tipo de protesta realizar contra el bombardeo de la OTAN sobre su país. Los capitanes de la selección -Mijatovic, Stojkovic y Savicevic- optan por no jugar hasta que cesen los ataques aliados. Otro sector, con el técnico del Atlético, Radomir Antic a la cabeza, prefiere protestar jugando."Así no podemos concentrarnos para jugar un partido de fútbol", se lamentó ayer Mijatovic. Pero otros jugadores no han tardado en desacreditar la huelga: Mijailovic, el central del Lazio, ayer calificó de "invitación absurda" la propuesta de sus capitanes. En el Ourense, Djurjevic, según informó Onda Madrid, también se opuso al boicoteo: "No es manera de ganar esta guerra. Si se trata de hacer algo, mejor ir allá y coger un fusil. No jugar no es la solución". Reposado, el ideólogo de mayor peso contra la huelga, Radomir Antic, habló ayer del valor de hacerse ver: "Lo más coherente es jugar con un brazalete negro. Siempre es mejor estar que no estar, ser protagonista que ausente. Es ahora cuando tenemos que demostrar el carácter que nos diferencia, y se lo he dicho a algunos jugadores. Mi opinión está teniendo una buena respuesta".

Los jugadores serbios de la Liga italiana de baloncesto optaron por descartar la huelga y jugar hoy con un brazalete negro. Lo anunció Saha Danilovic, militante del Bolonia: "En un principio, pensamos en no saltar a las canchas, pero eso se habría olvidado pronto. Vernos jugar con el lazo negro puede servir para que la gente entienda nuestro punto de vista".