Un traspaso de 258.223 millones

Las transferencias educativas ya son, tras dos años de incertidumbre, una realidad inminente. El próximo 1 de julio, la Comunidad de Madrid tomará las riendas de toda la enseñanza no universitaria de la región: 910.000 alumnos, 59.000 profesores y 33.500 aulas repartidas entre 1.842 centros educativos. El traspaso de competencias lo oficializaron ayer el ministro de Educación, Mariano Rajoy; el de Administraciones Públicas, Ángel Acebes, y el presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, todos del PP. La factura final de la operación se eleva a 258.223 millones de pesetas.Dentro de 98 días, la Administración regional asume a todos los efectos la responsabilidad sobre la enseñanza hasta los 18 años, igual que en 1995 hiciera con los niveles universitarios de la educación. La Consejería de Educación será quien emita las nóminas de los 39.248 profesores de escuelas, colegios e institutos públicos y la que deba lidiar con las políticas de inversiones y reducción del fracaso escolar. Nunca hasta la fecha se había formalizado un traspaso de funciones de la Administración central a la autonómica por un montante tan cuantioso como éste. Los 258.223 millones pactados por las dos partes firmantes suponen un ligerísimo incremento -apenas un 0,9%- sobre los 255.000 millones que Ruiz-Gallardón y la entonces ministra del ramo, Esperanza Aguirre, se fijaron en el acuerdo de intenciones del pasado 30 de julio. Las negociaciones de los últimos meses le han servido al Ejecutivo regional para arañarle 3.000 millones más a la Administración central del Estado, aparte del compromiso de una subida en torno al 6% entre los ejercicios de los años 2000 al 2003, ambos inclusive. Este matiz se traduce en 60.000 millones de financiación adicional durante los próximos cuatro años, una cantidad que Ruiz-Gallardón y su consejero educativo, Gustavo Villapalos, encuentran "suficiente" para poder afrontar con éxito la completa implantación de la Ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE).

La primera consecuencia tangible del traspaso la percibirán los 40.000 docentes públicos en sus nóminas del mes de julio. Una vez que es la Comunidad de Madrid la responsable de la educación, comienza a aplicarse el criterio de homologación retributiva respecto a los funcionarios de otras comunidades autónomas. A partir de julio, los maestros cobrarán 13.000 pesetas más al mes, un incremento que será de 19.500 pesetas durante el segundo año y de 26.000 en el tercero, al igual que se ha pactado en las transferencias educativas de Cantabria.

La portavoz socialista de Educación, Carmen Ferrero, tachó el acuerdo de "claudicación", ya que los 258.000 millones están lejos de los 325.000 de los que habló el consejero de Educación, Gustavo Villapalos, en sede parlamentaria. UGT también señaló que la cifra acordada era "muy insuficiente".