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só La Thyssen renuncia a pedir la ampliación del espacio expositivo del Monasterio de Pedralbes

VIENE DE LA PÁGINA 1 La presentación de este nuevo ciclo en Barcelona sirvió también para anunciar la primera colaboración entre la Fundación Thyssen y la Fundación Caixa Catalunya, en cuya sede cultural, situada en La Pedrera, se presentará en noviembre de este año una exposición con los fondos impresionistas y posimpresionistas de la colección privada de Carmen Thyssen. Se trata de una colección importante, reunida en los últimos cuatro años, que tiene especial interés en lo que se refiere a los siglos XIX y XX y más concretamente en los impresionistas, posimpresionistas y primeras vanguardias a escala internacional, movimientos de los que hay pocos ejemplos en los museos públicos españoles. A finales del pasado año, la baronesa se mostró dispuesta a que parte de estas obras pudieran depositarse en el monasterio de Pedralbes si se adecuaban nuevas salas. La oposición de la comunidad religiosa clarisa propietaria del edificio, de algunas asociaciones ligadas al monasterio e incluso de CiU aconsejaron abandonar el proyecto. Se oponían a que la Thyssen fuera ganando espacios en el edificio en detrimento, consideraban, del carácter religioso e histórico del monasterio. Esto afecta no sólo a la ampliación de salas, sino también en parte al carácter más o menos moderno de las obras que allí puedan exhibirse. "Lo intentamos una vez, pero fracasamos", afirmó ayer Carmen Thyssen, que ahora está negociando con el Gobierno central la ampliación del museo madrileño en un nuevo edificio con el objeto de depositar allí su valiosa colección. La fundación, reconoció ayer Tomás Llorens, mantiene buenas relaciones con la comunidad y ha decidido renunciar a su demanda de nuevos espacios expositivos [se habló de habilitar el refrectorio] al constatar que no habría acuerdo. "En 1997 hablamos de una posible ampliación, pero fue complicado. No se puede hacer si esto afecta a la comodidad de la comunidad", afirmó ayer Ferran Mascarell, responsable del Instituto de Cultura de Barcelona. Mujeres que leen Carme Riera, impulsora del ciclo, será también la que abra el fuego esta noche con una conferencia en la que analizará la obra La Anunciación, de Veronés, un óleo de 1570 de la colección de Barcelona. "En las anunciaciones antiguas, la Virgen aprece cosiendo o bordando, como la describe la tradición oral, pero posteriormente aparece ya como una dama, y las damas, desde la Provenza del siglo XII, eran cultas y leían", comentó ayer Riera. "De hecho, ahora los editores hablan mucho de que las que más leen son las mujeres, pero yo creo que ha sido siempre así. Siempre han sido las mujeres las que más leían, y esto es algo que puede constatarse en la iconografía". Tras Carme Riera, le tocará el turno a la escritora Meri Torras, que hablará de Grupo de músicos (1650), de Van Loo. Le seguirán Ana María Moix, quien analizará un anónimo alemán datado hacia 1515 titulado Santa Ana con la Virgen y el Niño; Ángeles Caso, que hablará de Retrato de una dama (1530-1535), de Francesco Foschi; Maria Barbal, cuya conferencia se centrará en La Virgen con el Niño con las santas Margarita y Catalina (1500), de un seguidor de Michael Pacher; Josefina Aldecoa, que interpretará Santa marina (1641-1658), de Zurbarán, y, por último, Marina Mayoral, que dará su versión de Retrato de Helena Kay (1873), de Winslow Homer. Las conferencias, de aforo limitado, son gratuitas y se celebran todos los jueves a las 19.30 horas.

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