Satisfacción

La carta del Defensor del Pueblo publicada el día 11 en EL PAÍS con referencia a nuestro artículo sobre Despenalizar el "atrako" manifiesta que "esta institución en ningún momento ha solicitado la despenalización" de la ocupación de viviendas ajenas. Nosotros lo celebramos, y pedimos excusas si en nuestro artículo se contenían inexactitudes. Ahora bien, este artículo nuestro estaba basado en una información aparecida el 9 de febrero en el mismo periódico (que nosotros citábamos), cuyo titular decía: "El Defensor del Pueblo plantea a Justicia la posibilidad de despenalizar la okupación", y el texto subsiguiente era acorde con el titular, diciendo que el Defensor se hacía "eco de las críticas" de la Comisión de Defensa de los Derechos de la Persona, partidaria "de la despenalización de la okupación". Esta información no fue desmentida, y ello nos hizo suponer que era cierta. Reiteramos nuestra satisfacción de que el Defensor del Pueblo no apoye la despenalización de la apropiación violenta de bienes ajenos. Más satisfechos estaríamos si el defensor manifestase claramente que, lejos de resolver el problema de la vivienda, la okupación lo agrava, por la misma razón que la inseguridad jurídica y la violencia ciudadana no resuelven, sino que agravan, los problemas de distribución de la renta y la riqueza.-