Muere por un disparo de un guardia civil uno de los tres asaltantes de una casa en Benifaió

Una patrulla de la Guardia Civil sorprendió el pasado miércoles por la noche en una casa de campo de Benifaió (La Ribera Alta) a tres atracadores que, a punta de cuchillo, habían asaltado la vivienda y tenían maniatados al propietario y a su hijo. En el asalto falleció uno de los ladrones, A. Cortés Santiago, de unos 40 años, tras recibir un disparo en el pecho de un agente. Los guardias andaban buscando a los autores de un robo a un taxista cometido unos minutos antes cerca de Picassent. A las 20.45 hallaron la furgoneta utilizada en ese atraco junto a esta casa, en el camino de Alginet. En la planta baja se encontraron con los tres asaltantes y los dos inquilinos atados, a los que habían robado 600.000 pesetas. El cabo primero se abalanzó sobre uno de los ladrones. Mientras forcejeaban en el suelo le espetó a su compañero: "Si me quita la pistola dispara". Pero durante la brega el cabo resultó herido en un pie por una bala de su propia arma. No obstante, golpeó al atracador en la cabeza con la culata de su pistola y lo redujo. Mientras, un segundo asaltante se lanzó con un cuchillo hacia el agente que vigilaba la entrada y éste le alcanzó con un disparo en el pecho. A pesar del balazo, se dio a la fuga junto al tercer asaltante. Subieron las escaleras y saltaron por la ventana. Pero no le quedaron fuerzas para alejarse. Las patrullas que llegaron de refuerzo lo hallaron, malherido y tumbado en el suelo, a escasos metros. Falleció poco después en el hospital La Fe de Valencia. Su compañero escapó. El asaltante reducido por el cabo, Juan Cortes Santiago, de 39 años, hermano del fallecido, cumplía una larga condena en la cárcel de Picassent, pero disfrutaba de un permiso de siete días. Fue hospitalizado porque en el forcejeo se rompió un tobillo. La Guardia Civil imputa a esta banda 43 delitos, entre ellos numerosos asaltos a casas de campo y chalés habitados. Dicen que se distinguían por su "especial agresividad y el más absoluto desprecio hacia sus víctimas".