El Atlético no levanta cabeza
Los rojiblancos suman un solo punto en la segunda vuelta; el Tenerife gana y deja el último puesto
El Tenerife sumó su segunda victoria como local y abandonó el último puesto de la tabla. Todo a costa del Atlético, que sigue en horas bajas por la Liga. Los rojiblancos firman una segunda vuelta de campeonato desastrosa, con un punto de 18 posibles. El triunfo canario se fraguó en la primera mitad, fase en la que superó con claridad a los madrileños, que tuvieron en Molina a su jugador clave, al hombre que evitó una derrota mayor. El Atlético dominó en la segunda mitad, pero careció de remate. Ya saben, la falta de delanteros: Aguiar tuvo que improvisar con Roberto de punta, junto a José Mari, durante casi una hora de juego.El Tenerife salió dispuesto a mantener el buen nivel de juego mostrado el pasado domingo ante el Mallorca. Lo consiguió durante el primer periodo. Los de Aimar presionaron con orden y buscaron con insistencia la espalda de la defensa adelantada rival, con Makaay por el centro o Chano, por la derecha, desde donde se encargaba de colocar centros muy peligrosos. El conjunto madrileño se limitó en esa fase a enviar pelotazos al solitario José Mari, que estuvo bien sujeto por una ordenada defensa tinerfeña.
TENERIFE 1 -ATLÉTICO 0
Tenerife: Montoya; Dani, Julio Llorente, Lussenhoff, Alexis; Chano, Emerson, Felipe (Jokanovic, m. 72), Basavilbaso; Juanele (Mista, m. 90) y Makaay (Domingos, m. 79).Atlético de Madrid: Molina; Aguilera (Ramón, m. 89), Santi, Chamot, Toni (Tevenet, m. 76); Roberto, Jugovic, Venturín (Geli, m. 37), Serena; Juninho y José Mari. Gol: 1-0. M. 21. Makaay recorta a Jugovic y conecta un zurdazo a la escuadra desde fuera del área. Árbitro: Puentes Leira. Mostró tarjeta amarilla a Julio Llorente, Alexis, Basavilbaso, Chamot y Santi. Unos 20.000 espectadores en el estadio Heliodoro Rodríguez López.
El Atlético no llegaba a las inmediaciones de Montoya, pero el Tenerife sí a las de Molina, convertido en héroe. Tuvo que salir a desviar algunos envíos largos del Tenerife y desvió con acierto un cabezazo a bocajarro de Alexis. No pudo hacer nada en el gol, que llegó en una jugada espectacular de Makaay: se deshizo de varios contrarios y enchufó un disparo a la escuadra desde fuera del área.
Tras el 1-0, Carlos Aguiar tuvo que estrujarse la cabeza. Sin demasiadas soluciones ofensivas en su banquillo, improvisó: dio entrada a Geli para adelantar a Aguilera por la banda y colocar a Roberto en punta. La receta caseta equilibró el juego, pero el Tenerife siguió siendo más vertical y más dañino en los contragolpes. De hecho, Molina volvió a salvar a su equipo con otra intervención prodigiosa en un remate de cabeza de Juanele desde el área chica.
La segunda mitad comenzó con polémica: en el primer minuto se anuló un gol al Atlético por fuera de juego de Santi, que pescó un rechace de Montoya a tiro de Jugovic. El asistente de Puentes Leira entendió que el defensa estaba en posición ilegal en el momento del disparo del yugoslavo.
No protestaron demasiado los rojiblancos, que buscaron el empate con insistencia pero con balas de fogueo. La contundencia defensiva del Tenerife y la impresionante labor de Emerson por delante redujeron la producción de ocasiones atléticas. El Tenerife montó peligrosos contraataques casi siempre culminados por Makaay: tuvo varias ocasiones el holandés, pero el palo y Molina evitaron que el marcador se ampliara.
El grupo de Aguiar empleó más corazón que cabeza en los minutos finales, pero llegó poco. Sólo con peligro en una chilena de José Mari y un tiro cruzado de Serena. Pero Montoya, como Molina, también estuvo acertado. Detuvo ambas.
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