El Grup Ecologista Samaruc denuncia un vertido incontrolado en el marjal de Pego-Oliva

Un nuevo vertido de residuos inertes, esta vez en el marjal de Pego-Oliva, vuelve a cuestionar la falta de protección en los espacios naturales de la Comunidad Valenciana. El Grup Ecologista Samaruc ha denunciado ante el Seprona de la Guardia Civil y la Consejería de Medio Ambiente la existencia de un vertedero incontrolado en la partida conocida como Racó Fuster, ubicada dentro de los límites del parque natural en el término de Oliva. Según los ecologistas, junto a los restos de construcción han aparecido hierros y plásticos de todo tipo. Asimismo, denuncian la existencia de filtros de aceite industrial y contenedores de lata "de difícil identificación" entre los escombros, mezclados con gran cantidad de neumáticos de automóviles, así como frigoríficos sumergidos en el interior de la balsa de agua del humedal. La asociación ecologista considera que estos abocamientos constituyen "un atentado grave contra el ecosistema" del marjal, de alto valor ecológico, y alteran su equilibrio ambiental. Estas actuaciones, añaden, atentan contra la Ley de Espacios Protegidos de la Comunidad Valenciana y suponen "una clara omisión de la tarea de vigilancia por parte de las autoridades". La aparición de estos residuos, según la agrupación Samaruc, pone además en entredicho la obligación de las autoridades de garantizar la protección del entorno ambiental y de velar por el uso racional de los recursos naturales. Mediante sendos escritos, los ecologistas exigen al Ayuntamiento de Oliva y al consejero de Medio Ambiente, el regionalista José Manuel Castellà, que "inicien las medidas oportunas" para intensificar la vigilancia de vertidos incontrolados. Asimismo, instan a ambas entidades a que "realicen las gestiones e investigaciones oportunas para descubrir y denunciar a los responsables de los abocamientos" y restablecer el estado natural en la zona afectada.