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CiU negocia liberar de peaje la B-30 con cargo al presupuesto antes de las autonómicas

lona [EN] Miembros del Gobierno han negociado con Fomento una posible liberación de peaje de la B-30. El sistema empleado para ello sería el peaje a la sombra, es decir, el Gobierno catalán asumiría el pago a la concesionaria de entre 2.000 y 3.000 millones de pesetas al año en concepto de compensación. Ésta es la cantidad que dejarían de pagar los usuarios. CiU busca con ello un pacto con Fomento que le permita llegar a las elecciones autonómicas del próximo otoño con algo en las manos. El mismo sistema se propone para rebajar los peajes de las autopistas de la Generalitat.

El consejero de Política Territorial, Pere Macias, anunció ayer que su Gobierno negocia con Autema y Aucat rebajas para las autopistas que estas empresas tienen en concesión. La primera gestiona el tramo Terrassa-Manresa y la segunda la A-16. Macias hizo estas declaraciones 24 horas después de que el Parlament instara al Gobierno catalán a negociar esta rebaja para que los precios de estas vías (20,43 pesetas por kilómetro de media) se equiparen a los de las dependientes del Estado (sobre las 10 pesetas por kilómetro). Macias anunció también, en declaraciones a la emisora institucional Catalunya Ràdio, que el sistema utilizado para compensar a las concesionarias será el peaje a la sombra, es decir, una compensación con cargo a los presupuestos del Gobierno catalán. El consejero no dijo nada sobre otro peaje que depende de él, el de la A-17, en la salida de Mollet, ni sobre los túneles de Vallvidrera y del Cadí, también concesión de la Generalitat. El Gobierno de CiU había sostenido en las dos últimas discusiones sobre peajes mantenidas en el Parlament que los asuntos de los peajes debían ser discutidos en una comisión parlamentaria creada al respecto. Los socialistas habían denunciado que esta actitud era más que hipócrita porque sólo se aplicaba para bloquear las peticiones de la izquierda, mientras que el Gobierno no tenía inconveniente alguno en negociar al margen del Parlament. Los socialistas expresaron ayer su satisfacción por el anuncio de las rebajas de los peajes hecho por Macias con tanta celeridad. Ya el día anterior, el diputado Manel Nadal había anunciado en el Parlament que el Gobierno catalán estaba negociando con el Ministerio de Fomento la liberación del peaje de la B-30, hecho que fue repetido ayer por el candidato socialista Pasqual Maragall durante una visita a la zona. "¡Bienvenidas elecciones!" La idea del Gobierno catalán es que la supresión de este peaje se produzca en septiembre, pocas semanas antes de las elecciones autonómicas. Este hecho hizo que Nadal exclamara en el Parlament: "¡Bienvenidas elecciones!". El Gobierno está seriamente preocupado por el fracaso que supuso el pacto para rebajar los peajes a cambio de un aumento de las concesiones, pacto que ya tuvo que ser revisado antes de entrar en vigor por las protestas populares. CiU, tras aquel fiasco del que se responsabiliza directamente al secretario de Política Territorial, Josep Grau, pretende presentar a la ciudadanía una serie de rebajas escalonadas. En primer lugar, en las autopistas dependientes de la Generalitat, cuyo precio duplica al del resto de la red. Macias anunció ayer que la rebaja sería cuestión de semanas y que las compensaciones a las concesionarias se harían con cargo al erario público, por el método de peaje a la sombra. Los críticos de este sistema destacan que grava a todos los ciudadanos y beneficia sólo a los conductores que usan las autopistas. El pasado domingo, una empresa contratada por el Gobierno catalán preguntaba a los usuarios de la autopista de Manresa qué opinarían de una rebaja en este peaje que rondara el 30%. A cambio de responder, los conductores podían pasar gratis por la barrera del peaje.

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