El PP descarta un pacto preelectoral con el PSOE en Euskadi y prevé presentarse en todos los municipios

José María Aznar centró su intervención de ayer ante el nuevo Comité Ejecutivo del PP, elegido en su reciente congreso, en la complicada situación política en el País Vasco. Así, reafirmó su compromiso por la paz "sin precio ni condiciones", en referencia a la presión de los nacionalistas para el traslado de los presos etarras a cárceles vascas. En otra alusión crítica al PNV, denunció también "la deslegitimación de las instituciones vascas y de su Parlamento" que se ha producido en estos días con el asunto kurdo. El PP descartó ayer la posibilidad de hacer pactos preelectorales con el PSOE en Euskadi.

"La paz no tiene precio ni condición, aunque algunos quieran abrir vías de condiciones para alcanzar la paz", comentó el portavoz oficial del PP, Rafael Hernando, recordando la intervención de José María Aznar ante la Ejecutiva del partido. Fuentes de la dirección tradujeron esa frase como una advertencia a los nacionalistas vascos por sus constantes presiones para que se traslade a los presos etarras a cárceles de Euskadi.En relación con la cesión del Parlamento vasco a la autodenominada Asamblea kurda en el exilio, el PP también denunció ayer "la deslegitimación" que se está produciendo de esa institución y descalificó la cita de julio, en palabras de Hernando, como un "despropósito desagradable y chocante". El portavoz popular vinculó ese acto con el "pago de un favor" de ETA hacia otra organización terrorista, el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

Tras su ejecutiva, el PP hizo un llamamiento a la movilización en Euskadi. Tanto futura, respecto a la participación en sus candidaturas en las elecciones municipales de junio, como presente, para que la sociedad vasca no se deje amedrentar por la violencia. Hernando resumió así el estado de ánimo del partido: "ETA vive y existe en estos momentos y la paz y ETA son incompatibles". El propio Aznar apostó ayer de nuevo por revitalizar el Pacto de Ajuria Enea para consolidar el proceso de paz. Hernando descartó la posibilidad de alcanzar un pacto preelectoral con el PSOE para presentar listas conjuntas incluso en los lugares más conflictivos y aplazó cualquier conversación en relación con ello para después de los comicios y según la "aritmética electoral".

El PP se fijó oficialmente el objetivo de presentar candidatura en todos los municipios vascos, en los 250 existentes, mientras que en 1995 sólo lo hizo en 122. Hernando añadió, ya como una declaración de intenciones, que el PP quiere que todos los cabezas de lista y la mayor parte de los demás candidatos sean vascos. El portavoz avisó de que su partido alentará "el fenómeno" que está apreciando de personas que se acercan a colaborar en sus listas a medida que se reproducen las amenazas.

También se aprobaron ayer varios comités de trabajo con vistas precisamente a las elecciones municipales, autonómicas y europeas de junio. Pero, sobre todo, se constituyó el nuevo organigrama de campaña, que controlará el coordinador de Organización, Pío García Escudero. El PP presentará listas en 7.000 ayuntamientos -en 1995, en 6.830- y muchas mujeres en los primeros puestos por expreso deseo de Aznar.

En el PP se da por seguro que la presidenta del partido en Andalucía y candidata a la Junta será una mujer, probablemente Teófila Martínez. Por ahora no tienen ninguna candidata autonómica. Sí está claro que habrá muchas alcaldables. La primera novedad se producirá en Gijón, donde se nominará a Mercedes Fernández, recientemente encargada de la Secretaría del Área Municipal y que cuenta con la confianza de Francisco Álvarez Cascos.