Carod advierte a Maragall y Pujol que ERC quiere estar en el próximo Gobierno Los republicanos reservan una plaza de diputado para Carles Bonet

Esquerra Republicana (ERC) "no está en el centro, está en medio". Lo proclamó enérgicamente ayer el líder del partido republicano, Josep Lluís Carod. Estar en medio significa ser un componente prácticamente indispensable para cualquier combinación de gobierno. Ésa es, al menos, la aspiración de los dirigentes de ERC para la próxima legislatura autonómica. Carod habló ayer ante un centenar de militantes de su partido que participaron en el XXI Congreso de la Federación de Barcelona de ERC, celebrado en el centro social de la Barceloneta. Antes ellos lanzó un mensaje nítido a quienes les "cortejan". Es decir, a los dos aspirantes a encabezar el próximo Gobierno catalán, Jordi Pujol y Pasqual Maragall. Comenzó por este último. "No habrá gobierno de izquierdas en Cataluña sin Esquerra. Que tome nota quien debe hacerlo", le advirtió. Luego se dirigió a Pujol: "No habrá ningún "paso adelante nacional" sin Esquerra", aseguró. Para que ERC pueda colaborar con unos o con otros hacen falta, dijo Carod, "gestos". Por si no quedaba claro lo repitió cuatro veces seguidas. Luego repartió a derecha e izquierda. A CiU le dijo que su campaña para aumentar la financiación de la Generalitat carece de credibilidad. "No puede haber soberanía fiscal si no hay soberanía política", sentenció. Acercándose a las ideas expuestas por Maragall, consideró también "evidente" que CiU utiliza la campaña en pro de las selecciones deportivas catalanas "para distraer la atención que de otra forma se dirigiría sobre su mala gestión". Eso no le impidió, naturalmente, asegurar: "Si los españoles no renuncian a sus selecciones nacionales, nosotros no tenemos por qué renunciar a las catalanas". Respecto a los socialistas, destacó que ERC ha encontrado por por fin alguna coincidencia con ellos. Eso ha sucedido, explicó, con la decisión del canciller aleman Gerhard Schröder de no seguir subsidiando regiones "en las que sólo se crean puestos de empleo como funcionarios". Afirmó que ERC quiere ser solidaria con los jornaleros andaluces, "pero no con la duquesa de Alba". El congreso de la federación de Barcelona de ERC sirvió para que la dirección del partido republicano hiciera las paces con Carles Bonet. Fue elegido para ocupar un puesto destacado en la candidatura de las elecciones autonómicas. Esto equivale a garantizarle una plaza de diputado. La trayectoria de Bonet en el partido republicano tropezó en 1994 con la de Pilar Rahola, que le apeó de la plaza de primer candidato en la lista de ERC para el Ayuntamiento de Barcelona. Luego compitió con Àngel Colom para la secretaría general del partido. En todas estas batallas Bonet fue considerado un outsider por todos los bandos que competían por el poder en el partido. Estuvo siempre solo, aunque se benefició de la protección que, a distancia, le dispensó Heribert Barrera. Carod afirmó ayer que con la inclusión de Bonet en un puesto destacado de la candidatura al Parlament "Esquerra cierra definitivamente una puerta al pasado". Reconoció la labor realizada por Bonet en favor del partido y aseguró que "se merece" la designación.