_
_
_
_

Los rectores españoles condenan la "extrema violencia" de la policía en la Autónoma

La Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), reunida en Asamblea General, condenó ayer la "actuación desproporcionada y de extrema violencia de las fuerzas de seguridad" en los hechos ocurridos en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) el pasado día 14, con motivo de la visita del presidente del Gobierno, José María Aznar. Los 60 rectores, de todas las universidades públicas y privadas de España, lamentan los "negativos sucesos acaecidos en el campus, que han alterado imprudentemente la normalidad de la vida académica".

Los rectores declaran que la Universidad "es y ha de continuar siendo un ámbito de la libre expresión y el debate, donde se promuevan el espíritu crítico y el respeto a las diversas opiniones". Y añaden que el día de la visita de Aznar a la UAB, "ni la seguridad de las personas ni la normalidad universitaria parece que estuvieran en una situación que justificara la intervención de la fuerza pública en el espacio universitario". Para la CRUE, "los derechos de los ciudadanos, su seguridad y la autonomía universitaria deben ser siempre compatibles". La declaración añade que los rectores consideran que la responsabilidad de los hechos corresponde a las autoridades políticas y, en especial, a la Delegación del Gobierno de Cataluña, "que demostraron imprevisión, descoordinación e incompetencia". Por otra parte, el Sindicato Profesional de la Policía Uniformada (SPPU) afirmó ayer que la responsabilidad de los incidentes debe exigirse a las autoridades policiales y políticas, y no a los policías que actuaron en esa ocasión. El SPPU expresó en un comunicado su "máxima preocupación" por el cariz que "con el paso de los días" va tomando la actuación policial del pasado día 14. Para el sindicato, "lo que en un principio resultó ser una desafortunada intervención policial, en la que cabe y debe exigirse responsabilidades a las autoridades policiales y políticas concretas, ha pasado a convertirse en un juicio hacia el propio Cuerpo Nacional de Policía [CNP]". Según el comunicado, la Unidad de Intervención Policial (UIP) "tenía que hacer frente con escasísimos efectivos a dos eventos a la misma hora y lejos uno de otro", refiriéndose a la manifestación de trabajadores de Telefónica ante la Subdelegación del Gobierno y la presencia de Aznar en la UAB. El SPPU denuncia que en la citada fecha "los dos mandos coordinadores de la UIP se hallaban libres de servicio" y que el mando directo de la UIP estaba ausente "por lo que toda la responsabilidad recayó en mandos intermedios, que no tienen otra responsabilidad que el control operativo de los efectivos policiales y no la de tomar decisiones de tal envergadura". El sindicato considera "desafortunado, irracional e ilógico" que la UAB declare non grato al CNP porque el cuerpo "ha demostrado durante el periodo de transición política del país ser un firme baluarte defensor de los valores constitucionales" y añade que nadie puede poner en "tela de juicio" el trabajo que durante dos décadas han efectuado los profesionales que integran la institución. Un palo para la delegada Las reacciones a la brutal carga de la policía en el campus de Bellaterra siguieron ayer. Un grupo de jóvenes de IC-EV intentaron infructuosamente entregar un palo de madera a la delegada del Gobierno Julia García-Valdecasas. Una decena de jóvenes leyeron un manifiesto ante la Delegación del Gobierno reclamando la dimisión de su titular y recordando que el padre de García-Valdecasas, que fue rector de la Universidad de Barcelona durante el franquismo, también dejó en su día que "la policía reprimiera a sus estudiantes". Ignasi Riera, diputado de esta formación política en el Parlament, y Joan Saura, diputado en el Congreso, presentaron ayer preguntas en ambas instituciones en relación con el "malestar" que están generando las declaraciones gubernamentales sobre los incidentes. Riera pidió que la Generalitat se pronuncie sobre la comparecencia del ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, que citó al movimiento okupa entre los "radicales violentos" que intervinieron en los hechos de la UAB.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_