El reclamo visual de las portadas de jazz y los iconos sexuales de Lindner se dan cita en el IVAM

Dos exposiciones con marcado acento americano se inauguraron ayer en el IVAM. Jazz gráfico. Diseño y fotografía en los discos de jazz, 1940-1968 propone un recorrido inusual por esta música a través de 180 cubiertas discográficas cuyo interés artístico va más allá de la idea de "golosinas visuales" asociada a las portadas. Richard Lindner es una retrospectiva dedicada a este artista norteamericano, precursor del pop art y autor de obras de gran colorido en las que destaca la representación de mujeres como iconos sexuales. En la presentación de las muestras, el consejero de Cultura, Francisco Camps, comentó que la afluencia al IVAM ha aumentado en 1998 un 22% respecto a 1997.

De origen alemán, Lindner (1901-1978) es un espejo en el que se miró el pop art español. Eduardo Arroyo es un confeso admirador de sus pinturas, que entraron a España por Valencia, señaló el director del IVAM, Juan Manuel Bonet, quien subrayó, en este sentido, la oportunidad de exponer la muestra organizada por la Fundación Juan March y exhibida en Madrid. El responsable de la Fundación, José Capa, se refirió a la influencia en el Equipo Crónica de Lindner, del que se muestran 46 obras. De carácter novedoso, por ser un camino apenas transitado, es la exposición dedicada a las portadas de jazz que, en palabras de Bonet, refleja el ritmo sincopado de esta música. Su comisario, Jorge García, ha dejado a un lado su pasión musical por el jazz para centrarse en el valor de las cubiertas, algunas de ellas realizadas por artistas como Warhol o Sahn, que se acercaron de manera eventual a esta disciplina. Pero la mayoría de las brillantes portadas son de diseñadores como David Stone, Paul Bacon o Burt Goldblatt. Éste último, autor de 3.000 portadas, asistió a la inauguración. La exposición, con fondos de museos y colecciones privadas, arranca en 1940, año en que Steinweiss diseñó la primera cubierta para un disco de 78 revoluciones, y se cierra en 1968, cuando surge con fuerza la estética psicodélica, del rock y el pop, explicó el comisario. Por otra parte, el IVAM fue visitado en 1998 por 263.000 personas, siendo la muestra de Paul Klee la más concurrida, con 70.000 visitantes.