El PP justifica la crisis de Pontevedra como el precio por "hacer limpieza"
La dirección del PP gallego no da la batalla por perdida y asegura que aún está a tiempo de atajar las deserciones en la provincia de Pontevedra, donde un grupo de alcaldes y concejales populares ha roto con el partido y creado una plataforma de independientes para acudir a las elecciones municipales del próximo junio.Aunque no cejará en sus esfuerzos para paliar los daños causados por la escisión, el partido que preside Manuel Fraga sostiene que las fugas no tendrán una incidencia relevante en los comicios, y si la tuvieran, argumenta un alto dirigente del PP gallego, sería el precio inevitable por la necesidad de "hacer limpieza". Los populares subrayan que entre los promotores del nuevo grupo hay personas con condenas judiciales y un pasado derechista que, según la dirección, no encaja en sus nuevos postulados.
El partido, subrayan fuentes de la dirección, no tiene el menor interés en recuperar a algunos de los fugados, cuya personalidad incluso se consideraba un lastre para el nuevo mensaje ideológico de los populares. Es el caso, por ejemplo, de uno de los cabecillas de la plataforma independiente, José Castro, un histórico del partido, alcalde de Ponteareas desde hace 30 años y que pretendía encabezar de nuevo las listas a pesar de que el Tribunal Supremo ya ha dictado contra él dos condenas de inhabilitación.
Castro ha sido expedientado por el partido y su expulsión puede aprobarse en las próximas semanas. La dirección ha acumulado una lista de agravios, entre ellos un comunicado de la junta local del PP de Ponteareas que criticaba la posibilidad de que el Gobierno conceda medidas de gracia a los presos de ETA. Castro, sin embargo, insiste en que no quiere enfrentarse al PP e incluso proclama su disposición a pactos postelectorales con el partido en que militó desde su fundación.
El PP asegura que tampoco tiene el menor interés en recuperar al ex alcalde de Nigrán Avelino Fernández, muy polémico por sus actuaciones urbanísticas, ni al ex senador y ex regidor de Vilagarcía de Arousa, José Luis Rivera Mallo, en contra de quien se esgrime una gestión presuntamente poco clara cuando presidía la autoridad portuaria de la ciudad.
En cambio, la dirección regional aún espera alcanzar un acuerdo con la alcaldesa de A Guarda, Purificación Álvarez, que ya se ha adherido a la plataforma pero a la que se pretende contentar con un puesto de concejal. De momento, los dirigentes populares ya han conseguido frenar la deserción del ex alcalde de Tui, Miguel Capón.
Los integrantes de la plataforma dirigen sus ataques al secretario general del PP gallego, Xosé Cuiña, quien les excluyó de las listas. Aspirante a suceder a Fraga, Cuiña ha preferido asegurarse fidelidades y ofrecer una imagen de renovación aun a costa de los posibles perjuicios electorales en una provincia en la que él mismo preside el partido. En el entorno del secretario general no se oculta que el PP tiene muy pocas posibilidades de mantener las alcaldías de Vigo y Pontevedra, pero se confía en que los avances en otras zonas compensen la pérdida y el partido mantenga el 48% de votos en el conjunto de la provincia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.