Artes y Oficios reflexionará este año sobre el diseño valenciano en su 150 aniversario
La Escuela de Artes y Oficios de Valencia se encuentra metida de lleno en la organización del 150º aniversario de su fundación, que se cumple en 1999. La conmemoración coincide con un año en el que el Ministerio de Educación y las consejerías competentes deberán resolver la reconversión de los estudios de diseño, que la LOGSE contempla como enseñanzas superiores no universitarias, bien elevándolos al rango de diplomatura, o dejándolos a nivel de FP. En este contexto, la Escuela pretende que la celebración sirva como eje de reflexión sobre el futuro del diseño en el siglo XXI.
La Escuela de Artes y Oficios vive uno de los momentos más decisivos de cara a su futuro. Desde que en 1849 se reoganizaran las enseñanzas de las academias provinciales, suprimiéndose la enseñanza de Arquitectura de la Academia de San Carlos de Valencia y creando las Enseñanzas Elementales de Dibujo que serán el origen de las actuales enseñanzas de Artes y Oficios, la Escuela ha vivido, al menos, cinco etapas críticas de transformación hasta hoy. Pero quizá, ninguna sea tan decisiva como la que se avecina con la reforma de los planes de estudio que puede dejar a una institución que está considerada entre las tres mejores escuelas de diseño de España en un centro de Formación Profesional de Nivel III o elevarla al rango de estudios superiores, con nivel de diplomatura. Esto último permitiría a sus estudiantes y profesores acceder a la Universidad y entrar en el sistema de intercambios y becas con las instituciones europeas, con las que, a pesar de no tener la homologación académica, mantiene una estrecha colaboración desde hace casi dos décadas. En este contexto, el comité técnico del 150º aniversario, en el que están integrados docentes de todas las especialidades que se imparten, ha diseñado una agenda de actividades que arrancarán el próximo 12 de abril y continuarán hasta el último trimestre de 1999, vertebradas en seminarios, exposiciones, desfiles de moda y proyectos en coordinación con el sector empresarial. El año dedicado a la reflexión sobre el futuro de las enseñanzas del diseño alcanzará su máxima expresión con la reunión del máximo órgano de representación de los centros europeos de diseño -el Comité Ejecutivo de la European League Of Institutes of the Artes (ELIA)- en Valencia. Una decisión que, en la práctica, refuerza el peso de la Escuela en la junta directiva europea como homenaje a su trayectoria centenaria. Proyecto mediterráneo El impulso europeo, según fuentes del comité, servirá de espoleta para llevar a buen puerto el proyecto de puesta en marcha de una Escuela Mediterránea del Diseño. El proyecto, que ya está en fase de conversaciones con la Asociación para el Diseño de Roma, pretende que la sede española de la futura escuela mediterránea se ubique en Valencia. Al mismo tiempo, la estrecha colaboración que la Escuela mantiene con el sector empresarial e industrial valenciano se ha visto traducida en esta ocasión en un fuerte apoyo de importantes entidades financieras y económicas valencianas. Tal es el caso de la exposición de Proyectos de las diferentes especialidades en colaboración con el sector empresarial, que patrocina Bancaja y en la que colaboran el Impiva y el recién creado Consell de Disseny. La participación del Museo Nacional de Cerámica González Martí ha sido decisiva para montar la exposición de 12 ceramistas de reconocido prestigio formados en la Escuela de Valencia, que se inaugurará en octubre próximo. Entre las principales instituciones públicas figura el apoyo directo de la Universidad de Valencia, el Consorcio para la Revitalización del Centro Histórico de Valencia, Teatres de la Generalitat, la Diputación de Valencia, la Dirección General de Museos y Bellas Artes y el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM). Se espera también que la Consejería de Educación, que ha recibido el proyecto a mediados de diciembre, abandere la conmemoración como máxima institución educativa y cultural.
En la vanguardia española
El respaldo del Príncipe de Asturias a los actos conmemorativos del 150º aniversario de la Escuela de Artes y Oficios de Valencia tiene, más allá de la carga simbólica obvia, un peso de mayor calado, si se toma en cuenta que la participación de la Casa Real en cualquier actividad pasa por una exhaustiva etapa de consultas, donde la opinión de los expertos resulta decisiva. Y así ha sido también en este caso. El informe presentado por la Dirección General de Centros Educativos del Ministerio de Educación (MEC) sobre la trayectoria de la institución académica no sólo "respalda la iniciativa del 150º aniversario", sino que "valora positivamente" el que el Príncipe ocupe la presidencia del comité de honor. El informe concluye, tras una minuciosa descripción de la trayectoria y del nivel pedagógico de la Escuela, que "la conmemoración viene a resumir 150 años de desarrollo entre el arte y la industria a través de la formación de técnicos y creativos, en un momento como el actual en que, a las puertas del siglo XXI, el diseño español es uno de los factores de recuperación y convergencia de nuestra economía en el entorno de los países desarrollados". Y dentro del diseño español, el MEC sostiene que la Escuela de Valencia "es actualmente una de las escuelas de arte y diseño en la vanguardia en la pedagogía de estas disciplinas en España". Esta trayectoria, añade el informe, se concreta en "una ingente tarea de apertura externa a proyectos en los que los alumnos adquieren una formación eminentemente práctica y un sentido de aplicación de su contingente creativo". Lo cual, precisa, se refleja "en los datos estadísticos que constan en los colegios y asociaciones profesionales" y en "los premios nacionales e internacionales de que han sido merecedores sus alumnos y ex alumnos". Como reseña de actividades, el informe ha seleccionado una serie de proyectos diseñados por la Escuela en colaboración con instituciones y empresas, entre los que resalta: la realización de los talleres didácticos del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM), entre 1993 y 1998, para las exposiciones de Naum Gabo, Kurt Shwitters, Andy Warhol, Francis Picabia, David Smith, Eric Satie y El objeto surrealista; también destaca el estudio realizado en 1994 con la empresa Gec-Alsthom sobre una cabina de aseo para trenes accesible a discapacitados físicos, proyecto en el que participaron la ONCE y la Cruz Roja; y añade la participaciónen el diseño de la escenografía y vestuario para la representación de las óperas Las bodas de Fígaro (1993), Don Pascuale (1994) y La Revoltosa (1995). Por último, la Dirección General de Centros hace hincapié en que "hace ya 25 años, la Escuela inició una línea de reflexión sobre la función social de su enseñanza, hasta constituirse en la actualidad como un centro educativo de referencia en la formación de profesionales del diseño".
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